PAN deja fuera a la única legisladora que no trabajaba por ocurrencias

¡Qué hay, vecinos y vecinas!

¿Cómo los anda tratando la santa empanizada que nos está recetando don Goyo?

Oigan, es que de tanta fumarola el Popo se parece a los políticos que nomás echan llamaradas de petate en su actuar legislativo o gubernamental.

Ni modo… ¡A barrer! El patio y también a los políticos.

Nomás no echen agua porque la ceniza se hace engrudo y los políticos se multiplican como gremlins.

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¡Qué cosas de la vida!

Justo hace unos días la diputada Lupita Leal Rodríguez dijo en un foro sobre la participación política de las mujeres que los espacios para ellas aún son acotados y especialmente repartidos por y para hombres.

Palabras más, palabras menos.

Pero cuando sus dichos quedarían en la memoria de las y los asistentes al foro, así como en la bitácora del encuentro que organizó la UDLAP, resulta que su partido, el PAN, le dijo que ya chole, que no la iban a dar chance de relegirse y pues que gracias por su trabajo pero que ya era suficiente.

¡Cómo ven!

La noticia cayó de sorpresa porque de esa Legislatura que no dio resultados, que prometió y prometió, y que primero fue una vocería del fallecido gobernador Miguel Barbosa y luego un trampolín político, Lupita fue de las diputadas más destacadas, sino es que la más.

Eso sí, nuestros vecinos chismosos nos contaron que a Lupita no la ven con buenos ojos en Acción Nacional por su agenda a favor de la movilidad y muy cercana al discurso progresista que tanto prurito le saca a la derecha, toda vez que sus reclamos han hecho mella entre la unión de comerciantes que se niega rotundamente a las ciclovías, a los límites de velocidad y demás estrategas a favor del peatón.

Además de que su propuesta para cancelar la licencia permanente de conducir no fue del agrado de uno que otro empresario.

Así es, el PAN saca por la puerta de atrás a la única legisladora que trabajaba por una agenda definida y no por la ocurrencia.

¿El colmo?

Dicen que ese lugar será para el regidor del actual ayuntamiento Manolo Herrera Rojas, cercano al candidato a la gubernatura por el PRIAN, Eduardo Rivera Pérez, por lo que se rumora que esa posición la pidió como una de tantas condiciones para aceptar la candidatura.

Parece broma pero ya es anécdota.

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De cotorreo loco lo de los ahora conocidos como La Guayaba y La Tostada de las ruedas de prensa.

Javier Lozano Alarcón y José Juan Espinosa Torres se unieron como los Gemelos Fantásticos en forma de voceros de la coalición Mejor Rumbo para Puebla para hacerle frente, sin guantes de por medio y sí con mucha vesícula biliar, a los morenistas y hasta a los desertores del PRI.

Si hace años entre ellos vivía la discordia, la mentada y el albur gratuito, ahora todo lo dejaron en el pasado, se sonrieron, se reconocieron pares e hicieron equipo.

Los dos se dividieron los ataques, primero contra Pepe Chedraui, el candidato morenista a la alcaldía, y luego trataron de responsabilizar a la Inteligencia Artificial del audioescándalo de Paola Angón, no tanto para defenderla a ella sino para limpiar el nombre del líder tricolor Néstor Camarillo.

Uno y otro señaló a Jorge Estefan Chidiac de ser el autor intelectual quesque porque no le dieron candidatura en el Revolucionario Institucional.

Los antes archirrivales se pusieron la playera del mismo equipo, aunque hay quien dice que el futbol que practican no funciona en ese conjunto, que es como tener a dos cazagoles en el área que continuamente chocan entre sí.

También hay quien dice que era la única opción para hacerle frente al equipo contrario: agarrar un balón botando en el área para empujarla a la portería, entre trompicones, patadas, jaloneos de camiseta y hasta piquetes de ojos.

¿Les dará resultado su estrategia, a pesar del descrédito que ambos personajes cargan?

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Vecinas, vecinos, nos leemos mañana. Acuérdense que el que se enoja pierde. Les dejo mi correo por si quieren chismear más a gusto: [email protected]

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