Redacción

Como parte de la conmemoración del Día Mundial de la Poesía, el Instituto Municipal de Arte y Cultura de Puebla (IMACP) realizó diversas actividades relacionadas con la agradable acción de leer.

Entre diversas actividades, destacó el evento masivo realizado en el atrio del templo de San Francisco (avenida 14 Oriente número 805 barrio Del Alto), en donde un a través de la acción titulada ¿Has visto llover poesía?, un globo aerostático que partió del atrio lanzó 40 mil volantes con poemas de ocho autores latinoamericanos fallecidos recientemente, entre los que destacan Blanca Valera, José Emilio Pacheco y Álvaro Mutis.

La idea de esta acción fue realizar un evento social que simbolizara el encuentro entre varias dimensiones: cielo-tierra, lenguaje oral-lenguaje escrito, a través del símbolo de la ascensión que nos conduce de manera directa a la poesía mística.

La poesía, como espacio habitable por todos, compartido por todos, cae desde las alturas para regresar al lector, que la recibe como recibimos la lluvia, de forma intensa y renovadora.

Esta acción supone el estreno de la Red Nuclear de Creación. Los volantes incluyen una dirección de correo electrónico en la que inscribirse si se forma parte de algún colectivo artístico poblano.

Cada año, el 21 de marzo, la UNESCO celebra el Día Mundial de la Poesía e invita a reflexionar sobre el poder del lenguaje poético y el florecimiento de las capacidades creadoras de cada persona.

De acuerdo con la decisión de la UNESCO, el principal objetivo de esta acción es apoyar la diversidad lingüística a través de la expresión poética y dar la oportunidad a las lenguas amenazadas de ser un vehículo de comunicación artística en sus comunidades respectivas.

Por otra parte, este Día tiene como propósito promover la enseñanza de la poesía; fomentar la tradición oral de los recitales de poéticos; apoyar a las pequeñas editoriales; crear una imagen atractiva de la poesía en los medios de comunicación para que no se considere una forma anticuada de arte, sino una vía de expresión que permite a las comunidades transmitir sus valores y fueros más internos y reafirmarse en su identidad; y restablecer el diálogo entre la poesía y las demás manifestaciones artísticas, como el teatro, la danza, la música y la pintura.