La cantante Míriam Solís recuerda que el gusto por cantar primero fue por imitar a su mamá y después cuando tuvo la oportunidad en la universidad de pertenecer al grupo folclórico, lo que le dio la oportunidad de visitar varias partes del mundo y entre ellas conocer a Armando Manzanero.

“Tengo ya casi 20 años cantando: mi gusto por la música surge a los 8 años que empecé a tomar clases porque mi mamá le gusta cantar mucho y por imitarla. Soy Licenciada en Administración de Empresas y me dieron una beca en el Tec de Monterrey para estudiar la carrera y yo estaba en el grupo folclórico de la universidad y estuve haciendo giras por todo el mundo. Me fui a estudiar a España para prepararme y grabé un video y un disco que se llama No renunciaré y así empezó todo; luego hice otro disco Para la virgen de Guadalupe y algunos otros proyectos.”

Míriam conoce en Brasil al maestro Armando Manzanero, quien decide ayudarla y es así como nace su proyecto.

“Me invitaron a Brasil con Beatriz Paredes en la embajada y ahí conozco al maestro Armando Manzanero; me presento con él, le presento el mariachi, le platico de mi música y él me dice que le gustaría apoyarme y sacamos un disco con Universal Music, con mariachi que tiene fusiones con flamenco, 10 canciones son con mariachi y una con los macorinos.

Solís dice que la importancia de cantar con mariachi en la actualidad es por la identidad que se logra a través de su música.

“Para mí es muy importante porque es la música que nos representa como país. Es importante seguir con la difusión de la música mexicana, seguirla fomentando, dándoles el espacio y la importancia, porque el conjunto de elementos que conforman al mariachi es único. Y eso habla de que los mexicanos queremos que se hagan las cosas bien y de que queremos salir adelante.”

Para la cantante vernácula el trabajar con Armando Manzanero, fue un aprendizaje, lo que la hizo ser más perfeccionista.

“Mucha gente me lo ha dicho que he sido una privilegiada la trabajar con él, porque mucha gente quiere hacerlo. Y sí fue un privilegio, fue una experiencia muy enriquecedora. Antes de sacar este disco mi calidad vocal cambió, creo que mejoró. Como profesional uno se hace al trabajar con perfeccionistas igual a tratar de hacer las cosas mejor. Yo aprendí mucho y él fue muy paciente conmigo, porque en ranchero estás acostumbrado a aventar la voz y en este disco como son baladas el me ayudo a matizar mi voz, a usar mis diferentes matices y eso le da diferente resultado y gracias a dios eso me ayudó mucho. A él le gusta mucho la música mexicana y tiene el talento para hacerlo.

Soy una privilegiada de haber trabajado con Armando Manzanero, pero más que eso me siento con un compromiso bien grande porque él le dedicó mucho tiempo.”

No existen límites, se estrenó el pasado 4 de marzo y se encuentra disponible en las plataformas, Míriam Solís por el momento no piensa venir a la Angelopolis porque sigue trabajando en la preparación de su show, pero dijo estar muy emocionada de que en un futuro pueda visitar a los poblanos.