Películas que no sabías que estaban basadas en libros

Realizar películas basadas en libros, —en una época en donde parece que la creatividad se fue de vacaciones—, es algo constante en la industria cinematográfica, ya sea que se trate de Hollywood o del cine nacional. Algunas de las historias de nuestras películas favoritas fueron retomadas de un libro que fue publicado algunos años atrás, y que, a pesar de tener cambios en el arco narrativo, conservan su misma esencia.

En la actualidad, son pocas las películas con libreto original, por ello es que en los grandes festivales cine y ceremonias de premiación existen dos categorías: mejor guión original y mejor guión adaptado, aunque eso no demerita los grandes trabajos que se están haciendo con los remakes de películas icónicas, y sobre todo la adaptación de libros que son publicados día con día. Estas son algunas películas que no sabías que estaban basadas en libros.

Shrek (2001)

Basado en el libro Shrek! de William Steig, publicado en 1990, esta cinta se convirtió en una de las favoritas de niños y adultos. La primera entrega de esta historia ganó el Oscar a la Mejor Animación en la ceremonia de 2002, y repitió la nominación con la segunda película sin ganar el premio.

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Clueless (1995)

Quién haya visto esta película sabrá que tiene todo para ser un drama adolescente norteamericano que pareciera no tener algún mensaje, pero contrario a eso, la enseñanza es muy valiosa. Este filme fue basado en el libro Emma de la escritora inglesa Jane Austen, y a pesar de no haber sido nominada a ningún premio, se convirtió en una parte importante de la cultura pop que ha sido referenciada en otros productos visuales y sonoros.

Forrest Gump (1994)

Basado en el libro de Winston Groom, publicado en 1985, este filme consolidó a Tom Hanks como uno de los mejores actores de Hollywood y le brindó su segundo Oscar consecutivo; en total la película ganó seis estatuillas doradas. Un dato curioso es que el escritor Winston Groom no recibió una cantidad justa por los derechos de la obra, y los directores no lo mencionaron en ningún momento en las ceremonias de premiación.

Macario (1960)

Este ícono del cine mexicano está basado en la novela homónima de Bruno Traven. Fue tanto el éxito de este filme, protagonizado por el entonces joven Ignacio López Tarso y dirigida por Roberto Gavaldón, que fue la primera película nominada al Oscar en la categoría de Mejor Película Extranjera.

El crimen del padre Amaro (2002)

Basada en la novela homónima de Eca Queirós, el filme también forma parte de las grandes producciones de calidad de la cinematografía nacional; en la ceremonia de ese año de los premios Oscar fue nominada a la categoría de Mejor Película de Habla no Inglesa.