Agencias  Accesos del Capitolio de Estados Unidos y la Casa Blanca fueron bloqueados ante un tiroteo en sus inmediaciones, informó el cuerpo de policía encargado de la seguridad en las instalaciones. Autoridades policiacas pidieron a los empleados del Capitolio que se resguarden después de informes de disparos al interior del Centro de Visitantes. Las mismas autoridades reportaron que un policía del Congreso tuvo una herida menor de bala y que hay un presunto agresor bajo custodia. El suceso Los hechos tuvieron lugar en un momento en que los legisladores se encuentran de vacaciones. El centro de visitantes, una parada turística frecuente en Washington, está ubicado debajo del Capitolio. Al centro se accede a través de una plaza que hay en la parte trasera del edificio. El suceso tuvo lugar en el auge turístico de la capital estadounidense, donde las autoridades tuvieron que bloquear durante alrededor de una hora los accesos, que acoge los hemiciclos de la Cámara de Representantes y el Senado, así como los de la Casa Blanca, la cual fue cerrada de manera temporal poco después de que el presidente Barack Obama y su esposa Michelle encabezaran la ceremonia tradicional de los huevos de Pascua, antes miles de invitados a la residencia ejecutiva. Más tarde fue reabierta aunque el Capitolio continuaba cerrado al público en medio de una intensa movilización de patrullas. El sospechoso Se presume que el sospechoso era conocido por las autoridades de seguridad del complejo legislativo pues en octubre pasado, fue detenido tras interrumpir una sesión de la Cámara de Representantes mientras gritaba que era un “profeta de Dios”, según la cadena televisiva MSNBC, incluso se contaba con una orden judicial donde el sujeto tenía prohibido acercarse a los alrededores del Capitolio. Los uniformados recolectaron un arma en el lugar del incidente y encontraron el coche del sospechoso en los alrededores. “Basado en la investigación inicial, creemos que este es el acto de una sola persona que frecuentaba las instalaciones del Capitolio. No hay razón para creer que sea algo más que un acto criminal”, dijo el jefe de la policía del Capitolio, Matthew Verderosa. Un funcionario explicó que no se han encontrado pruebas de una posible conexión terrorista; no obstante, algunos videos muestran el pánico que se desató entre los asistentes, pues a pesar de que las principales ciudades estadounidenses han reforzado su seguridad tras los atentados de la semana pasada en Bruselas donde murieron 35 personas y fueron reivindicados por el Estado Islámico, no se pudo prevenir este lamentable acontecimiento.