Benjamin fue el primero de los siete jueces en pronunciarse. Su decisión en ese sentido era esperada. Los demás magistrados deben de votar en el transcurso de la tarde.

En caso de que la mayoría vote como Benjamin, Temer perdería su mandato y el Congreso tendría que elegir a un jefe de Estado interino hasta diciembre de 2018.

El TSE juzga desde el martes una vieja denuncia de que la fórmula compuesta por la ex presidenta Dilma Rousseff y Temer recibió donaciones ilegales en la campaña de su reelección en 2014. Como vicepresidente, Temer asumió el poder el año pasado tras la destitución de Rousseff.

El juicio es visto en Brasil como una posible salida a la grave crisis institucional que sacude al país desde hace tres semanas, pese a que no está relacionado con el escándalo de corrupción en torno al presidente.

Temer hace frente a una denuncia de que se benefició durante años del pago de sobornos. La fiscalía investiga al líder conservador para decidir si abre un proceso por corrupción, entre otros cargos.

Temer se niega a dimitir, pese a que varios sectores políticos y económicos del país exigen su renuncia.