Deja solo el Ejército a presidente de Nicaragua
Las fuerzas castrenses llamaron a la paz y al diálogo; destacan que apoyan la intervención de la iglesia para dar solución a la crisis
Ejército de Nicaragua hizo un llamado a la paz y el diálogo, en medio de violentas demandas contra el gobierno del presidente Daniel Ortega. "En estos momentos de dolor y de luto nos corresponde a todos reflexionar y contribuir a que sigamos construyendo la Nicaragua que merecemos", dijo el ejército en un comunicado difundido ayer. Las fuerzas armadas dijeron solidarizarse con las familias que han perdido seres queridos y a todos los afectados por la violencia, "apoyamos los esfuerzos para esclarecer estos hechos y se proceda conforme ley", indicó el comunicado. El ejército dijo que el diálogo es "la única ruta que evitará afectaciones irreversibles a nuestro pueblo, a nuestra economía, al desarrollo nacional y a nuestra seguridad" y dijo apoyar los esfuerzos del gobierno "en la búsqueda de una solución por la vía del diálogo" y la intermediación del cardenal Leopoldo Brenes. "La solución pacífica a la situación que actualmente vivimos nos permitirá continuar trabajando con seguridad, estabilidad, tranquilidad y la paz, que tanto nos ha costado", se lee en el comunicado. De esta forma el Ejército tomó distancia de Ortega al asegurar que "no reprimirá" a la población que se manifiesta. "No tenemos por qué reprimir" a la población que se manifiesta en las calles. "Creemos que el diálogo es la solución" para resolver la actual crisis, señaló el sábado el portavoz del Ejército, coronel Manuel Guevara, sobre las generalizadas manifestaciones y bloqueos de carretera que sumieron al país en una crisis y que han dejado 51 muertos. Guevara dijo que la posición de las fuerzas armadas en esta crisis, que lleva casi un mes, esta apegada al mandato constitucional de "proteger objetivos vitales para el funcionamiento del país". "Rechazamos informaciones manipuladas que nos quieren hacer aparecer reprimiendo" las protestas, manifestó Guevara en relación a presencia de soldados en algunas entidades públicas. El gobierno afronta las peores protestas en 11 años, iniciadas el 18 de abril en rechazo a una reforma del seguro social, que se generalizaron en todo el país ante la ira que causó la represión y para reclamar democracia y libertad. El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) informó el día de ayer que la cantidad fallecidos ascendió a 53, como resultado de las protestas. Los dos últimos sucesos de fallecimientos ocurrieron en enfrentamientos el sábado en Masaya. Por su parte, el gobierno mencionó que había 10 fallecidos el 20 de abril, desde entonces no ha actualizado la cifra.
|