La quema de terrenos es una actividad común en estos meses debido a que los agricultores preparan sus tierras para la siembra Rosalía Sánchez Corresponsales Acatlán de Osorio.- Debido a la notable sequía que prevalece en los campos de este muncipio, hasta el momento se han presentado 12 incendios forestales en comunidades pertenecientes a esta demarcación. De acuerdo con el regidor de Ecología, Pedro Cabrera Flores señaló que la mayor parte de estos incendios fueron provocados por la práctica de la tumba, roza y quema. Agregó que esta actividad se realiza en estos meses debido a que muchos campesinos tienen que preparar sus tierras para la siembra. Explicó que al quemar los pastizales provocan la generación de abono natural para la tierra, lo que augura una cosecha segura. Indicó que quienes realizan estas quemas, a veces pierden el control de lo que realizan y les es imposible detenerlo. Especificó que los 12 incendios forestales presentados fueron de menor intensidad y sólo han poca quema de campo. El funcionario detalló que cada uno de los siniestros ha consumido alrededor de 100 metros cuadrados de pastizal, es decir, se dañaron en total mil metros cuadrados. Agregó que estas acciones son sólo limpia de predios; descartó otras afectaciones y pérdidas humanas. Dijo que la mayor parte de estos siniestros se dieron en las comunidades de Galeana, Garzones, Amatitlán y Tianguistengo, los cuales pertenecen al municipio de Acatlán. Refirió el funcionario la importancia de que los campesinos tomen las medidas de seguridad en caso de realizar la tradicional tumba, roza y quema. Por otra parte, previó que en este mes y los dos próximos, aumenten los incendios forestales en la región, toda vez que se incrementa la limpia de lotes de siembra. Aunado a esto, dijo, las altas temperaturas que prevalecen en el valle son factor de riesgo para el incremento de los incendios. Cabrera Flores pidió a los agricultores tomar todas las medidas necesarias al momento de utilizar el fuego como técnica de limpieza. Agregó que toda precaución es insuficiente cuando se trata de proteger el patrimonio, pues este problema no sólo afecta los cultivos, sino también las zonas aledañas, por lo que es primordial proteger la vida de los habitantes.