nota 1 Se disculpa Sedena por actos de tortura
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El secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos lamentó el comportamiento de uniformados del Ejército y Policía Federal Agencia El Universal 
El secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda, ofreció una disculpa a los agraviados por los hechos ocurridos el 4 de febrero de 2015 en el municipio de Ajuchitlán del Progreso, Guerrero, donde una mujer fue torturada. Durante un mensaje ante más de 26 mil elementos de tropa, el general Cienfuegos Zepeda lamentó el comportamiento de algunos soldados y sostuvo que “quienes actúan como delincuentes y desobedecen, no son dignos de pertenecer a las fuerzas armadas”. Desde el Campo Militar Número 1-A, el titular de la Defensa Nacional indicó que casos como los que se ven en el video son hechos deplorables que denigran como soldado y traicionan la confianza que día a día se ganan de la sociedad. “Los he reunido este día porque es necesario expresar nuestra indignación por lo que sucedió en Ajuchitlán del Progreso; en nombre de todos los que integramos la institución ofrezco una disculpa a los agraviados”, señaló. Indicó que estos actos están muy alejados de los principios y valores que les inculcan en la institución y dañan la imagen que han forjado en 100años. “Quienes actúan como delincuentes y desobedecen no son dignos de pertenecer a las fuerzas armadas. Ningún soldado en el país puede consentir a quienes atenten contra la vida, la seguridad y la integridad de los mexicanos”, enfatizó. Agregó que para la sociedad las fuerzas armadas son instituciones confiables y para mantener el prestigio “debemos cumplir con nuestro deber”. “Se actuó sin dilación llevando ante los tribunales militares a los implicados. Además se dio intervención al Ministerio Público de la Federación”, mencionó. “Los exhortó, los instruyó a que no permitamos estos hechos irracionales que nos denigran ante los demás como institución destinada a la soberanía. Nuestra conducta debe ser intachable porque es una obligación ética y moral que debemos cumplir a cabalidad”, puntualizó. Esta es la primera vez que un secretario de la Defensa se disculpa por un caso de tortura.
El secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda, ofreció una disculpa a los agraviados por los hechos ocurridos el 4 de febrero de 2015 en el municipio de Ajuchitlán del Progreso, Guerrero, donde una mujer fue torturada. Durante un mensaje ante más de 26 mil elementos de tropa, el general Cienfuegos Zepeda lamentó el comportamiento de algunos soldados y sostuvo que “quienes actúan como delincuentes y desobedecen, no son dignos de pertenecer a las fuerzas armadas”. Desde el Campo Militar Número 1-A, el titular de la Defensa Nacional indicó que casos como los que se ven en el video son hechos deplorables que denigran como soldado y traicionan la confianza que día a día se ganan de la sociedad. “Los he reunido este día porque es necesario expresar nuestra indignación por lo que sucedió en Ajuchitlán del Progreso; en nombre de todos los que integramos la institución ofrezco una disculpa a los agraviados”, señaló. Indicó que estos actos están muy alejados de los principios y valores que les inculcan en la institución y dañan la imagen que han forjado en 100años. “Quienes actúan como delincuentes y desobedecen no son dignos de pertenecer a las fuerzas armadas. Ningún soldado en el país puede consentir a quienes atenten contra la vida, la seguridad y la integridad de los mexicanos”, enfatizó. Agregó que para la sociedad las fuerzas armadas son instituciones confiables y para mantener el prestigio “debemos cumplir con nuestro deber”. “Se actuó sin dilación llevando ante los tribunales militares a los implicados. Además se dio intervención al Ministerio Público de la Federación”, mencionó. “Los exhortó, los instruyó a que no permitamos estos hechos irracionales que nos denigran ante los demás como institución destinada a la soberanía. Nuestra conducta debe ser intachable porque es una obligación ética y moral que debemos cumplir a cabalidad”, puntualizó. Esta es la primera vez que un secretario de la Defensa se disculpa por un caso de tortura. 
