“Huitzilan cambió gracias al Movimiento Antorchista. Hoy vemos a nuestro pueblo muy cambiado, ha tenido una gran transformación y, por eso, ahí estamos y vamos a seguir; estamos dispuestos a dar la vida por esta causa justa”, dijo Filiberto Hernández Bonilla, integrante del pleno campesino del Movimiento Antorchista, ante un nutrido grupo de estudiantes. Los jóvenes, pertenecientes a diferentes estados e Integrantes de la Federación Nacional de Estudiantes Revolucionarios “Rafael Ramírez” (Fnerrr), escucharon de voz de un campesino la historia de progreso de este municipio, que inició hace 32 años. Hernández Bonilla afirmó que Huitzilan es un municipio víctima del capitalismo, y por ello hace más de 35 años se convirtió en un botín para los caciques y la UCI, pues estaba sometido por la violencia y la miseria; sin embargo, en 1984, a la llegada de Antorcha, se transformó, recobró su libertad, la p az social y comenzaron a mejorar las condiciones de infraestructura. El presidente municipal, Manuel Hernández Pasión, explicó que la UCI en los años 70 cometió más de 150 asesinatos, así como violaciones, quema de viviendas y obligó a familias enteras a abandonar su municipio. Pero fue gracias a la lucha que dio Antorcha y a la guía del Maestro Aquiles Córdova Morán —dijo— que el pueblo huitzilteco fue salvado. “La organización nos vino a salvar la vida. Los huitziltecos no esperábamos obras de infraestructura, queríamos paz y tranquilidad social. No sólo se restableció la paz, sino que ahora hay obra material y eso ha hecho que nosotros vivamos como seres humanos, a mucha gente se le ha educado”. En tanto, los jóvenes manifestaron su solidaridad y apoyo a la lucha que han dado los huitziltecos para mejorar sus condiciones de vida y para salir de la opresión en la que estaba sometido el pueblo.