Hasta un 40 por ciento disminuyeron las ventas la noche de reyes, informó Elvira Trujillo Bolaños, lideresa de los comerciantes, quien expresó que la difícil situación económica que se vive en el país se reflejó en la vendimia, pues la mayoría de los compradores optaron por artículos de bajo precio.

La venta se realizó en el Parque Jardín Guadalupe, ahí se ubicaron alrededor de 180 puestos, donde los reyes y sus ayudantes podían elegir distintos productos, desde drones hasta juguetes de pilas o muñecos de trapo; los más socorridos fueron los que tiene que ver con la tecnología o con alguna caricatura de moda.

Trujillo Bolaños mencionó que ya no son las vendimias de décadas atrás, cuando amanecían ofertando sus productos y a las 10 horas del 6 de enero la mercancía se les había acabado. Este año, a la 1:30 horas algunos cerraron porque no había compradores.

A decir de la entrevistada, la tradición de reyes no se pierde en la región, pero cada año hay menos dinero para que los reyes hagan sus compras.

Además, los niños no siempre piden juguetes; las tabletas electrónicas y los celulares también forman parte de la lista de regalos, lo que hasta hace unos años no era común.

La lideresa de los vendedores comentó en entrevista que las compras que ellos hacen para la venta de reyes la realizan durante octubre y noviembre.

Si bien la inversión hecha por los comerciantes es importante, tampoco se arriesgan a comprar juguetes que sean caros, porque es difícil que "salgan".

 "Ya mejor nos vamos por lo económico", apuntó la lideresa, al tiempo de recordar que la noche anterior hubo quien llegó con apenas 50 pesos, "para lo que alcanzara", porque no pudo reunir más.

Ante los rumores de que habría saqueos en la ciudad, unidades de las policías Estatal y Municipal tenían rondines de forma constante.

Incluso en algunas tiendas, como Aurrerá y Chedraui, hubo presencia de elementos estatales hasta que cerraron sus puertas; el saldo fue blanco de acuerdo con las autoridades.