Miguel Ángel Ramírez, coordinador de la asociación civil Un Niño Mixteco, informó que han identificado en el municipio de Acatlán de Osorio a 10 familias que tienen, al menos, un infante con problemas de desnutrición severa o moderada.

Consideró que la cifra aún no es alarmante, tratándose de un municipio urbano; sin embargo, buscan atender la problemática e identificar otros niños que pudieran presentar algún grado de desnutrición, esto mediante diversas jornadas en diversas zonas de la mixteca.

Resaltó que luego de identificar a los infantes con desnutrición, mediante el Ayuntamiento apoyan a sus familias con la instalación de un huerto, así como una dotación de gallinas, para que tengan la oportunidad de ayudarse y evitar este tipo de casos.

En contraste, también han identificado en el municipio muchos menores con obesidad por el consumo de bebidas azucaradas y productos industrializados con alto contenido calórico, lo cual es un problema porque condiciona la presencia de enfermedades cardiacas, vasculares y cerebrales, entre otras.

Citó que México ocupa el primer lugar en obesidad a nivel mundial, por eso debe hacerse consciencia en mejorar hábitos dietéticos y disminuir el riesgo de presencia de diversas enfermedades. Asimismo, calificó de necesario realizar actividades como la toma de peso y talla, circunferencia abdominal, entre otros.

Hizo un llamado a los padres de familia para que asuman su responsabilidad y se involucren en las actividades del hogar para abatir esta problemática en la mixteca poblana.

Indicó que muchas de las veces las madres de familia prefieren carnes, alimentos enlatados y demás comida chatarra, que alimentos naturales, muchos de los cuales, en la mayoría de los casos, tienen un costo por debajo de los procesados.

Dijo que el problema de la desnutrición infantil se vive en todo el país, pero en la mixteca se agudiza aún más por las costumbres en torno a alimentar niños con comida chatarra, haciendo a un lado verduras y frutas.

Por último, aseveró que los programas internacionales de organizaciones como el Banco Mundial o el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), destinados a combatir la pobreza, llegan a México pero son utilizados con fines políticos, personales o grupales.