Las puertas de la iglesia de Santo Domingo, en Izúcar de Matamoros, permanecen cerradas; asimismo, de las del atrio sólo una hoja permite el acceso, a pesar de que el templo está de fiesta.

Lo anterior se debe a la negativa de José Santiago Álvarez Cabrera, párroco de Santo Domingo, y a Emanuel, el vicario, de sólo permitir la instalación de vendedores en el atrio lateral de la iglesia, con 30 comercios, entre juegos mecánicos, antojitos y cerveza. En tanto, en el atrio de la parte frontal niegan la instalación de 40 comerciantes que llevan una antigüedad de 45 años.

Los inconformes mencionaron que durante la noche las autoridades eclesiásticas los mantuvieron "secuestrados", toda vez que les cerraron las puertas para poder salir y tuvieron que dormir en este sitio.

Francisco Hernández, comerciante, expresó que piden que se les permita colocarse con sus productos como lo hacen cada año y no sólo a unos cuantos.

A decir de los comerciantes, fueron advertidos por las autoridades con ser retirados por la fuerza si es que se colocan, a pesar de que entre ellos hay adultos mayores y personas con discapacidad.

Hasta la tarde del martes se reporta la presencia de elementos policiacos en la iglesia de Santo Domingo.