Debido a que la Diócesis de Tehuacán no cuenta con obispo, ante la designación del pontífice Rodrigo Aguilar Martínez a la Curia de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, el 3 de enero se nombró al sacerdote Benito Leobardo Arroyo Romero como administrador.

Como lo marca el Código de Derecho Canónico, ante la vacante en la Diócesis el Colegio de Consultores de la misma nombró al presbítero Arroyo Romero como administrador diocesano, mientras la santa sede nombra al nuevo obispo y éste toma posesión.

El administrador de la diócesis tiene la función de continuar los trabajos pastorales de la curia, así como dar continuidad a la misión de la iglesia mediante el Tercer Plan Diocesano de Pastoral, además de gestionar los apoyos para la restauración de los templos afectados por el sismo del 19 de septiembre.

Un administrador diocesano cumple con casi todas las funciones del prelado, aunque su labor sólo es temporal, mientras se elige al máximo jerarca católico para la región.

Aguilar Martínez, ahora obispo de San Cristóbal de las Casas, estuvo en el mismo cargo en esta región durante 11 años y tuvo bajo su responsabilidad 57 parroquias, 3 cuasi parroquias y 3 comunidades de Misión Pastoral, en 28 municipios poblanos.

La designación del nuevo jerarca de la iglesia católica en esta zona podría tardar hasta un año, ya que será el Vaticano la instancia que dé el nombramiento y en donde podría considerar a los sacerdotes de la misma diócesis para su elección o de otro lado.