Durante su gestión, el Ayuntamiento de Tehuacán no ha construido en las juntas auxiliares ninguna de las tres plantas tratadoras de aguas residuales que se tenían contempladas, aún cuando la Comisión Nacional del Agua (Conagua), incluso sancionó a la Comuna por la contaminación ambiental que generaban las aguas residuales, señaló el presidente de la comunidad subalterna de Santa María Coapan, Miguel Ángel Flores Albino.

Dijo desconocer la razón por la cual no se ejecutaron estas obras, ya que tanto él como sus homólogos de Magdalena Cuayucatepec y San Diego Chalma, donaron los terrenos para la ejecución de estas plantas de tratamiento; sin embargo, lo atribuye a que al no ser una vistosa infraestructura se le dio prioridad a otros proyectos.

Indicó que en el caso de Santa María Coapan, el foco de contaminación que se registra es fuerte, porque las aguas residuales se encuentran a cielo abierto, incluso la Conagua desde hace dos años emitió un par de sanciones a la administración local, esto por el manejo inadecuado de la red sanitaria de la parte poniente y le requirió la edificación de la planta de tratamiento.

Refirió que es de suma importancia para esta comunidad contar con la infraestructura para lograr tratar las aguas residuales, ya que estás podrían ser posteriormente utilizadas para los campos de riego de tallo alto.

Mencionó que la inversión que se requería para contar con este tipo de infraestructura era de alrededor de 10 millones de pesos, por lo que buscarán la forma de retomar el proyecto con las autoridades electas para que se ejecute, ya que es de suma importancia para la población y, en especial, para mitigar el daño ecológico que se presenta.

Agregó que, por parte de la Comuna de Tehuacán, para esta junta auxiliar quedan pendientes de realizar cuatro obras importantes: la planta de tratamiento de aguas residuales, el techado de un preescolar, así como la construcción de dos vialidades.

En litigio, planta en el municipio

En días anteriores, el síndico Miguel Ángel Romero Calderón reconoció que varios asuntos jurídicos se quedarán sin resolver "no por gusto, sino porque los procedimientos no se podrán concluir en los tres meses que faltan de gestión".

Uno de los que se mantiene en litigio es el de la empresa Odys Adversa, la cual estaba a cargo de construir una planta de tratamiento de aguas residuales, pero se rescindió el contrato porque no era viable la edificación del dispositivo que proponían. El litigio que se sigue con esta firma es para recuperar 30 millones de pesos que aporto tanto el Organismo Operador del Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Tehuacán (Oosapat) como el Ayuntamiento.