Debido a que más de 100 fraccionamientos de Tehuacán registran deficiencias en su construcción, el Ayuntamiento no los ha municipalizado hasta que corrijan las deficiencias, lo cual afecta a sus habitantes porque no pueden contar con los servicios de infraestructura básica, como alumbrado público, agua potable y alcantarillado.

El regidor de Servicios Públicos municipales, Pioquinto Apolinar Leyva, manifestó que muchos desarrolladores de vivienda no han cumplido con todos los requisitos para que los conjuntos habitacionales puedan ser recibidos por la Comuna y de esta manera ofrecer los servicios básicos, sobre todo de alumbrado público.

Reconoció que durante esta administración sólo 30 fraccionamientos han sido municipalizados, pero el número pendiente es importante y por eso se encuentran en penumbras sus calles, además carecen de agua potable y alcantarillado, pero se trata de una responsabilidad de las constructoras porque incluso no han realizado el trámite de municipalización correspondiente.

La mayoría de las viviendas de estos conjuntos habitacionales presentan vicios ocultos y no cumplen con la infraestructura que ofrecieron en su proyecto de construcción, por ello de no realizar las modificaciones correspondientes y cumplir al 100 por ciento con los estándares que exige el área de Obras Públicas y Desarrollo Urbano, la administración no podrá hacerse cargo de dotar de los servicios necesarios de urbanización.

Entre los requisitos que deben cumplir las empresas constructoras están entregar un censo del número de inmuebles, las condiciones que presenta cada uno de ellos, la donación a la Comuna del 20 por ciento del total del espacio que se haya fraccionado para áreas verdes, guarniciones y banquetas, entre otros.

Sin embargo, durante las supervisiones han encontrado deficiencias en las viviendas y que el cableado no es el adecuado, entre otras situaciones.

Comentó que el hecho de que la ley no señale un plazo determinado para que los fraccionamientos realicen las acciones de municipalización, hace que las empresas evadan su responsabilidad y perjudiquen a los compradores de las casas, ya que tampoco se hacen cargo de dotar de estos servicios.