TEZIUTLÁN - Autoridades de la dirección del Colegio de Bachilleres del estado de Puebla, cesaron de sus funciones Miguel Hoyos Rivera, quien venía desempeñándose como sub director del COBAEP plantel 9 de este municipio, ello tras haber sustraído seis montenes de acero con un valor de 18 mil pesos cada uno, mismos que serían utilizados para la cancha de usos múltiples, los cuales al desaparecer fueron reclamados a la dirección por los padres de familia, quienes compraron estos materiales.

Cuando la dirección estaba a cargo de Miguel Ángel Roldan Salazar, surgió la iniciativa de techar dicho espacio, tomando como acuerdo la cooperación de los padres de familia, lo que finalmente se hizo por obra del exalcalde teziuteco, quedando dichos montenes sin uso, pero con la premisa de ser ocupados en otra acción similar y fueron resguardados en la institución.

De este modo, durante la semana pasada, cuando algunos padres de familia se percataran de la ausencia de dicho materiales, solicitaron una explicación al actual director Marco Antonio García García, quien no supo dar razón alguna; fue el cuerpo docente y estudiantes, quienes revelaron que dichos artefactos de acero fueron sustraídos por el entonces subdirector, quien sin autorización alguna, se los habría apropiado.

Ante ello y por petición de los turares, el director de este plantel 9 habría dado aviso a la dirección general del COBAEP respecto a lo ocurrido, siendo los afectados quienes solicitaban su destitución inmediata, sobreviniendo de momento un acta administrativa, confirmando este martes su despido, al menos de esta institución, para en su lugar enviar a otro docente, que se espera que arribe en los próximos días.

Miguel Hoyos Rivera ya había sido acusado por los padres de familia por el manejo de recursos económicos y un desfalco, derivado del dinero reunido en la pasada graduación, entre otras anomalías presentadas.

Además, ya había sido reubicado en este COBAEP plantel 9, tras haber supuestamente haber cometido un desfalco en la secundaria técnica Número 1 de la ciudad de Puebla, donde también los padres de familia solicitaron su remoción, pero debido al compadrazgo político existente, fue insertado en este bachillerato.