Luego de que vecinos de la junta auxiliar de Nopala se opusieran rotundamente a la habilitación de un relleno sanitario, el gobierno municipal, encabezado por Gustavo Vargas, decidió llevar el proyecto a otra localidad, un predio en Venta Grande medianamente acondicionado, pues sólo fue deshierbado y aplanado, para confinar los residuos del municipio.

La mañana de ayer miércoles, cerca de las 7 horas vecinos de la localidad de Venta Grande retuvieron varios camiones recolectores de basura, los cuales trasladaban más de 80 toneladas de desechos que se producen en la demarcación.

El conflicto por la falta de un espacio para confinar la basura estalló desde el inicio de la actual administración, cuando el municipio de Zacatlán decidió invalidar un acuerdo que existía para recibir los residuos en su relleno sanitario a cambio de una remuneración.

Marco Antonio Rayón es el funcionario municipal y asesor encargado del proyecto para confinar los residuos; sin embargo, se negó rotundamente a hablar con este medio de comunicación. Los habitantes de la zona lo acusaron de ser una persona prepotente y poco sensible ante la situación, pues en esa localidad hay criaderos de trucha y es nacimiento de manantiales que proveen del vital líquido a todo el municipio.

El presidente auxiliar de Venta Grande, Juan León Urbina, apuntó que debe respetarse la voluntad del pueblo, por lo que al final llegó a un acuerdo para que las toneladas de basura fueran cargadas de nueva cuenta en una góndola y retiradas del lugar.

Pese a que se había logrado el presunto acuerdo para que fuera retirada la basura que ya había sido depositada, las unidades del ayuntamiento estuvieron retenidas hasta las 14 horas.

El edil no ha hecho ningún pronunciamiento por esta situación, ante el inminente inicio de la 81 Feria de las Flores del 15 al 24 de marzo.