Las cactáceas, así como la flora y la fauna que limitan con la biósfera Tehuacán-Cuicatlán, podrían resultar afectadas por el proyecto Parque Industrial de Energía Renovable (PIER IV), a pesar de que la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) presentada por la empresa responsable de la obra ya fue aprobada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), reveló el activista Gerardo Pérez Muñoz, miembro del Colectivo Hermanos Serdán.

El activista ambiental abundó en que hay daños que no son expuestos en la Manifestación de Impacto Ambiental y que tergiversan los datos expuestos en esa manifestación.

El PIER IV, licitado desde 2015 y con vigencia de 50 años, es el segundo parque de estas características instalado en Puebla, cuenta con una extensión cercana a las 2 mil hectáreas en Cañada Morelos y Chapulco y es desarrollado por Impulsora Latinoamericana de Energía Renovable, filial de la compañía española Iberdrola.

Esta obra pretende generar hasta 150 MW (megavatios) de potencia producidos por esta planta, que inició operaciones el 6 de diciembre de 2016 con una inversión de 300 millones de dólares y que espera ser inaugurada en septiembre próximo. Serían instalados hasta 54 aerogeneradores en Esperanza, Nicolás Bravo, Cañada Morelos y Chapulco.

Pérez Muñoz explicó que este proyecto no fue dado a conocer a las poblaciones vecinas que tienen influencia indígena; tampoco consideró el impacto social y señaló que ni la empresa ni el gobierno federal otorgaron los contratos para la producción y venta de esa energía.

Lo anterior podría representar violaciones al derecho que tienen los pueblos indígenas, campesinos y mestizos a una consulta libre, previa e informada, tal como está radicado el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo, así como en el artículo dos de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Expuso que la MIA aprobada por la Semarnat tergiversa datos para defender que el PIER IV no provocará daños importantes a la flora y fauna, pese a que está ubicada en una zona de cactáceas limitante con la biósfera Tehuacán-Cuicatlán.

Patrimonio Mundial

En julio de 2018 el Área Natural Protegida (ANP) Valle de Tehuacán-Cuicatlán, Hábitat Originario de Mesoamérica, fue inscrito en la Lista del Patrimonio Mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) como sitio mixto, al reconocer plenamente su Valor Universal Excepcional durante la 42a Reunión del Comité del Patrimonio Mundial, celebrado en Manama, Bahrein.

Se encuentra en la región centro-sur de México, entre los estados de Oaxaca y Puebla dentro del Área Natural Protegida Reserva de la Biósfera Tehuacán-Cuicatlán. Tiene una superficie de 145 mil 255 hectáreas.

Pie: El área natural protegida Tehuacán-Cuicatlán.