Con el objetivo de fomentar el acompañamiento y ayudar a las mujeres en caso de que sean acosadas, ofendidas o violentadas, un grupo de ciudadanos de la región dieron inicio a una campaña denominada "Toma mi mano, salva tu vida", con la cual se busca que sean los propios ciudadanos quienes brinden ayuda.

Los participantes tendrán que portar una pulsera que servirá como distintivo, e indicará que la persona se encuentran dentro del proyecto y está dispuesta a ayudar a quien lo necesite.

La maestra Olivia Martínez Torres, docente universitaria, señaló que esta campaña se enfoca en las mujeres que transitan en la vía pública, sobre todo en lugares muy concurridos, situación que los agresores aprovechan para ejercer violencia en contra de ellas.

La primera etapa consiste en portar una pulsera con la leyenda "toma mi mano, salva tu vida", con la que las mujeres podrán apoyarse entre sí, sujetarse literalmente de la mano y sentir que no están solas. La segunda etapa es acudir a denunciar los ilícitos.

Los hombres y mujeres que quieran integrarse al proyecto deben ser personas integras, que entiendan el compromiso moral que adquieren al usar la pulsera, pues deben estar dispuestos a actuar ante cualquier caso de alerta cada vez que sean "tomados de la mano".

Martínez Torres destacó que hasta el momento cerca de mil 500 personas se encuentran participando, y una gran parte de ellos son hombres que conocen la situación de vulnerabilidad en la que viven algunas mujeres; todos los inscritos están participando de manera voluntaria.

Recordó que el proyecto inició el 8 de marzo y se comenzó a trabajar en algunos municipios como Teziutlán, Teteles de Ávila Castillo y Atempan, donde se realizó una selección de personas para que se integraran, ya que los integrantes deben contar con algunos prerrequisitos; sin embargo, "toda persona que desee unirse a la campaña es bienvenida".

Destacó que también se impartirán algunos talleres de defensa personal, tanto para hombres como para mujeres, con el fin de controlar la situación ante algún ilícito, siempre que los agresores no estén armados, y que en caso de requerirlo puedan defenderse.

EL DATO: Aquellos que quieran integrarse al proyecto deben ser personas que entiendan el compromiso moral que adquieren al usar la pulsera.