El día martes, la alcaldesa sanandreseña Karina Pérez Popoca reveló nuevas cifras sobre los faltantes que su equipo de trabajo encontró, además de las 21 obras iniciadas y no concluidas por la gestión anterior, que representan 140 millones de pesos.

En rueda de prensa, Pérez Popoca anunció que se descubrió un faltante de 200 millones de pesos y que involucraría a varios funcionarios de primer nivel, secretarios y regidores que cobraron en la nómina municipal.

En la lista, aunque no reveló nombres, se encuentran incluidos familiares de integrantes de la pasada gestión municipal de San Andrés Cholula, que desde 1994 presentaron demandas laborales que van desde el millón de pesos hasta los 4 millones; también incluye echar abajo el Plan Urbano de Desarrollo, plan que fue heredado.

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Sin mencionar por su nombre a su antecesor, Leoncio Paisano, la presidenta municipal añadió que hubo dolo, mala fe y premeditación en la gestión pasada, debido a que la nuevas anomalías detectadas superan los 240 millones de pesos, dinero que se desprendió de las arcas municipales y que podría y debería ser utilizado en otros rubros, como infraestructura, salud o educación.

Pese a que apenas cumplieron 8 meses de gestión, reiteró que los culpables serán castigados y no se trata de una cacería de brujas o de un ajuste de cuentas, si no de respetar los derechos de quienes buscan las causas justas.

Dijo que en octubre del 2018, cuando se hizo la entrega-recepción, algunos funcionarios de primer nivel se habrían llevado hasta 500 mil pesos por concepto de sueldo, aguinaldo, prima vacacional y bonos de existencia.

Señaló como necesaria una auditoría externa y que el mismo Congreso del Estado intervenga e investiguen a fondo junto con las instancias correspondientes, pues en su administración no tolerarán anomalías, corrupción, abusos y malos tratos de la gestión anterior ni de la actual.