Nopalucan de la Granja, cuna del telégrafo

El municipio de Nopalucan de la Granja, fue uno de los lugares más importantes en el tema de la comunicación

Nopalucan de la Granja, cuna del telégrafo
Amauri JIMÉNEZ | La historia del telégrafo en el municipio de Nopalucan se remonta al año de 1850 Nopalucan de la Granja, cuna del telégrafo

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Por muchos años, la mayoría de los poblanos han ignorado que el municipio de Nopalucan de la Granja, ubicado en la zona centro del estado de Puebla, fue uno de los lugares más importantes en el tema de la comunicación.

Hace más de 140 años, en el auge de las primeras tecnologías, fue instalada la primera línea telegráfica que conectaba con la Ciudad de México.

Con la aparición de nuevas tecnologías en las telecomunicaciones, el telégrafo sirvió con puntos y rayas para transmitir miles de informes, saludos, felicitaciones, buenas o malas noticias; sin embargo, esto quedó en el olvido de muchos y como un recuerdo más de aquellos que ejercían el oficio de telegrafista.

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Historia del primer telégrafo en Nopalucan

En palabras del investigador histórico del municipio de Nopalucan, Isaac Grados Castillo, la historia del telégrafo en el municipio de Nopalucan se remonta al año de 1850, cuando el español Juan de la Granja, oriundo de Balmaceda, España, hizo una demostración pública enviando un telegrama entre el Palacio Nacional y el Colegio de Minería. Posteriormente, viaja a los Estados Unidos y en 1851 se instala en tierras mexicanas con la encomienda de iniciar un proyecto telegráfico: poner las primeras líneas desde el puerto de Veracruz hasta la Ciudad de México; sin embargo, el bajo presupuesto que a Juan de la Granja le fue otorgado en ese momento, por el gobierno del entonces presidente Mariano Arista, provocó que la primera línea telegráfica llegara a instalarse a Nopalucan, que en ese entonces era paso obligado para aquellos que viajaban con rumbo a la capital del país o al puerto de Veracruz para embarcarse al viejo continente.

Aunque no existe un archivo histórico de cuál fue la primera frase que salió de esta línea electromagnética, el primer mensaje que mandó Juan de la Granja fue de Nopalucan, un 5 de noviembre de 1851 al poblado de Córdoba, estado de Veracruz.

A la postre y al ver que los mensajes eran más fáciles de identificar y recibir, en 1852 la línea se extendió hasta Veracruz. Al siguiente año, se terminó otra línea, la llamada "del interior", que comunicaba la capital con Guadalajara y León. Después se instalaron diversas líneas en un periodo de seis meses, entre ellas las de Nopalucan a Veracruz, a Puebla, a la Ciudad de México y Guadalajara.

Nopalucan; escuela de telegrafistas de renombre

Al ver que en ese entonces el telégrafo era un oficio y muy pocos entendían la manera de aportar este servicio, Juan de la Granja instauró una escuela en el municipio, donde algunos nopaltecos figuraron en el plano nacional por ser excelente telegrafistas.

El caso más sonado fue el de Antonio Mancilla, quien nació en 1832 y trabajó en la primera oficina de telégrafos que se instauró en esta demarcación, donde permaneció hasta 1859, para después trasladarse a la capital poblana. Al ver que en ese entonces se suscitaban algunos pasajes históricos y que estaban a punto de ocurrir, como la Batalla de Puebla, el mismo Mancilla se prestó voluntariamente a desempeñarse como voluntario telegrafista para mandar los telegramas a la capital del país por parte del general Ignacio Zaragoza. Años después, trabajó bajo las órdenes del general y posteriormente presidente Porfirio Díaz, quien años más tarde fue condecorado.

El uso del telégrafo día a día fue apartado con la llegada de las nuevas tecnologías.

En 1992, bajo el mandato del entonces presidente Carlos Salina de Gortari, se denominó al municipio de Nopalucan como "Cuna Nacional del Telégrafo" y se la añade "De La Granja", en honor a Don Juan, quien llevaba el mismo apellido. En esa misma fecha se envió el ultimo telegrama de Nopalucan hacia la Ciudad de México. Rufino Torres Loranca tuvo el honor de mandarlo.

Después de esa fecha, los aparatos de telégrafo cambiaron por completo y la antigua forma electromagnética de mandar mensajes desapareció, lo que dejó a un lado el legado de casi 141 años de historia del telégrafo en el municipio, el estado y en el plano nacional.

Como homenaje a la introducción de telégrafo en el estado y en el país, en el año 1993, bajo el mandato del entonces presidente municipal Cornelio Irigoyen, quien hizo la gestión directa con el entonces Telégrafos Nacionales, que aún no era Telecom Telégrafos como lo conocemos en la actualidad, se hizo un pequeño museo a un costado de la Presidencia Municipal de Nopalucan de la Granja, donde se exhiben algunos aparatos con los que mandaban algunos mensajes a diversos lugares de la República Mexicana. También se exhibe uno de los primeros telégrafos que fueron instalados en el municipio y que ocupó el mismo Juan de la Granja.

El historiador Isaac Grados Castillo asegura que Telecom Telégrafos no ha dado la importancia necesaria o ha difundido la existencia de este museo. Tampoco se ha realizado un convenio con la Secretaría de Turismo para darle la publicidad que requiere este museo, el cual es un legado del municipio de Nopalucan al estado y a la República Mexicana.

Trabajan por devolverle la importancia al legado que dejo el telégrafo

El actual presidente de esta demarcación, José Margarito Aguilar de la Cruz, mencionó que el objetivo central es que en primera instancia los niños y jóvenes nopaltecos, sepan el legado que dejo el telégrafo, posicionando el nombre del municipio en el plano estatal y nacional. Y es que el alcalde indica que las nuevas generaciones de Nopalucan, desconocen la historia del telégrafo en su demarcación, por lo que, en algunas escuelas de la zona y juntas auxiliares, se han empezado a hacer algunas visitas guiadas a este museo que incluso algunos desconocían que existían.

El alcalde enfatizó que, aunque hasta el momento no cuentan con apoyos por parte del estado ni de la federación, el Ayuntamiento que actualmente encabeza trabaja para dar la publicidad necesaria y aportar recursos para el mantenimiento del museo, que en pasadas administraciones estaba olvidado, y cuyos aparatos eran desechados o guardados en bodegas.

Aguilar de la Cruz hizo la invitación a los poblanos a conocer el primer y único museo del telégrafo instalado en la demarcación, con el objetivo de que conozcan más acerca de este gran legado, donde se planea en un futuro hacer recorridos en los lugares donde habitó Juan de la Granja, así como algunas haciendas que fueron piezas importantes en la economía del municipio en esa época de la instalación del telégrafo.

El Museo del Telégrafo está ubicado en la calle Ayuntamiento, a un costado de la Presidencia Municipal, en las actuales oficinas de Telecom Telégrafos, donde la entrada es completamente gratis.