Por falta de este líquido, la víctima accedió y entregó una parte de efectivo con la intención de que el empleado le hiciera entrega de un recibo firmado; sin embargo, el hombre regresó por el resto del pago, pero no presentó ningún documento, le cortó el servicio y se retiró del lugar.

La mujer acudió a las instalaciones del SOSAPAMIM para informar sobre el pago que realizó, así como la segunda suspensión del servicio. Le confirmaron que ningún empleado entregó algún reporte o dinero en efectivo. Tampoco le confirmaron si el hombre, de quien dio sus características, trabaja o no en la dependencia.

La mujer exigió a las autoridades justicia y una investigación sobre el caso, pues aseguró que no se vale que ni el propio director conozca a su personal.

De acuerdo con información extraoficial no es la única persona que fue engañada, pues son varios los usuarios que han presentado las mismas quejas, pero sus denuncias siguen sin ser escuchadas, por lo que solicitaron la devolución de su dinero o que se les tome en cuenta sobre su adeudo.