Los hechos se registraron en las instalaciones del comisariado ejidal, a un costado de la presidencia municipal. Un grupo de 10 ejidatarios que se dijeron hartos de la situación con el supuesto comisariado, a quien han desconocido, entraron a la fuerza para exigir su cambio, pues recordaron que su elección no respetó los votos emitidos en su momento.

Agregaron que el presidente municipal Guillermo Pozos, lo impuso y defiende, porque tienen en conjunto negocios ilegales.