Para Carlos, comerciante de la calle 16 de Septiembre, consideró como favorable que las calles no estén ocupadas, pues ahora sus clientes encuentran donde estacionarse, su negocio tiene más vista y hay menos basura.

“Ojalá así se queden las calles, es mejor para nosotros porque los aparadores y la mercancía se ve más, los clientes pueden venir sin problemas de estacionamiento y eso es bueno pero no sabemos que vaya a pasar después de que acabe esto del coronavirus”, dijo.

Otros comerciantes comentaron que sin los ambulantes hay menos basura y sobre todo más seguridad pues era común que asaltaran a la gente cuando pasaban por las calles ocupadas.

“Una encargada de una papelería, seguido pasaban personas pidiendo ayuda porque les habían quitado la cartera o a las mujeres les navajeaban sus bolsas y les sacaban el monedero, ahorita ya no hay eso”, comentó.

En las calles del centro de Texmelucan se instalan de manera frecuente unos mil 500 ambulantes y de acuerdo al proyecto de regularización comercial del actual gobierno sólo debería de haber 437 según un padrón histórico; sin embargo, con la contingencia sanitaria el proyecto se vio interrumpido y se desconoce qué medida se implementará cuando concluya esta etapa.