El cierre de panteones registrado por la contingencia sanitaria de Covid-19, durante la celebración de Todos Santos, realmente afectó a los productores de la flor de temporada, ya que no solo el 30 por ciento de su cultivo se quedó sin comercializar, sino que el costo al que se vendió fue muy barato, por lo que escasamente se logró recuperar la inversión de la siembra.

El presidente subalterno de San Diego Chalma, Eliseo Ramírez Pacheco mencionó que pese a que en esta comunidad solo se sembraron 10 de las 25 hectáreas de flor de moco de pavo o terciopelo, así como cempasúchil que se acostumbraban cada año, la venta del producto fue escasa, debido a que los panteones se mantuvieron cerrados por la pandemia.

El 30 por ciento de la producción se quedó sin comercializar, pese a la instalación de los comerciantes en diversos puntos de Tehuacán como de los municipios aledaños e incluso se trasladaron a la central de abastos de Huixcolotla, pero ahí la situación fue más complicada por el precio en que las ofertaron, explicó el presidente.

Detalló que la merma de la flor de temporada pudo ser más alta, pero los agricultores decidieron rebajar los costos para no quedarse con la producción.

En 2019 una maleta se vendía en 150 pesos, este año la dieron entre a 40 y 50 pesos.

Ahora la flor no vendida, se pondrá a secar para obtener la semilla y utilizarla para la siembra del año próximo y de esta manera no registrar mayores pérdidas, mencionó Ramírez Pacheco

Agregó que en estos momentos los campesinos de esta junta auxiliar no pueden apostarle a otra siembra más que la del maíz, ante la temporada invernal, pues los otros productos como la calabacita y el frijol, se verían afectados.

Finalmente dijo que también algunos productores de flor le estarán apostando a la siembra de girasol, la cual está teniendo demanda a nivel local, luego de que se aplicó el proyecto de algunas hectáreas demostrativas.