El gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas, anunció apoyos para los 300 locatarios del mercado de San Pablito de 11 mil pesos mensuales, así como de 20 mil pesos para los deudos de las 35 personas fallecidas en la explosión que se produjo el pasado 20 de diciembre.

"Soy un serio defensor de la pirotecnia y lamento muchísimo" lo que sucedió; "pero hay que ver para adelante" y poder corregir los errores para que esta actividad ancestral continúe, afirmó el mandatario mexiquense ante artesanos pirotécnicos.

Ávila Villegas anunció la entrega de 11 mil pesos a cada locatario con tarjetas electrónicas en la víspera de navidad, en enero, febrero y marzo de 2017; además, agregó, los apoyos continuarán hasta que se reconstruya el nuevo mercado con un proyecto ejecutivo que deberá ser elaborado por la Secretaría de Infraestructura, con asesoría de expertos de la Facultad de Arquitectura de la UNAM.

En tanto, los propietarios de los 27 vehículos dañados en la explosión, 10 con pérdida total y 17 con daños parciales, recibirán como apoyo el pago de los deducibles de sus seguros y quien no tenga cobertura recibirán un apoyo con cheques que empezarán a ser entregados este sábado.

Sobre la reconstrucción del nuevo mercado, éste debe ser con materiales ligeros, porque los tabiques se proyectaron "como una granada de esquirlas"; además de que Saúl Oviedo, ingeniero tultepequense, recomendó realizar un análisis de riesgos antes de que se construya el nuevo mercado.

Por ello, el secretario de Gobierno, José Manzur, informó que una delegación mexiquense viajará a China y España a conocer mercados seguros de pirotecnia para traer al Estado de México, modelos e incluso algunas estrategias para evitar nuevas tragedias de semejante magnitud que el martes provocaron la muerte de 35 personas y más de 60 heridos, cinco de ellos graves.

En Tultepec hay sólo 22 bomberos

A pesar de ser considerado como un municipio de alto riesgo por el desarrollo de pirotecnia, el Cuerpo de Bomberos de Tultepec apenas está conformado por 22 elementos que trabajan en dos turnos, 11 en cada uno, y atienden los siniestros que se presentan a diario.

Los bomberos apenas cuentan con dos camiones-bomba y dos pipas para apagar incendios, dos ambulancias y tres unidades de rescate ligero. Por si fuera poco, tanto ellos como los paramédicos, tienen un salario de apenas 2 mil 200 pesos a la quincena.

Además, trabajan con uniformes de segunda mano que están en buen estado, algunos son de sus colegas de Chicago, Estados Unidos, pero otros ni siquiera están completos y a simple vista se ve desgastados, otros incluso están rotos.

Antes de la explosión del pasado martes, los 22 bomberos de Tultepec daban atención a dos zonas prioritarias: el mercado San Pablito y el área conocida como La Saucera, donde hay más de 300 talleres de pirotecnia autorizados por la Secretaría de la Defensa Nacional, pero además tienen que estar pendientes de las posibles explosiones en casas que funcionan como talleres clandestinos.

Los vehículos con los que cuentan, aunque funcionales, carecen de nuevas tecnologías y herramientas suficientes para atender emergencias de grandes magnitudes. Cuentan con dos estaciones, la principal cerca de la zona centro, y una subestación en las inmediaciones de los polvorines donde hace dos meses explotaron 12 módulos, sin que en ese incidente hubiera fallecidos.

A pesar de las carencias y los salarios bajos, están orgullosos de su trabajo y no dudan que en cualquier momento del día pondrán su vida en riesgo por salvar a los habitantes de su comunidad.