La céntrica plaza del Zócalo de la capital mexicana amaneció este domingo repleta de tiendas de campaña, aunque el autodenominado Frente Nacional Anti Andrés Manuel López Obrador (Frena) anunció el levantamiento del campamento que lleva casi dos meses delante del Palacio Nacional.

"Por nuestra seguridad y para el bien de México: decidimos levantar provisionalmente el campamento por la libertad y justicia", informó el sábado por la noche en un comunicado el Frena, un colectivo ultraconservador que exige la renuncia del presidente López Obrador.

El Frena, liderado por el empresario Gilberto López, considera que durante sus casi dos meses de campamento en el Zócalo ha quedado "perfectamente expuesta" la "falta de vocación democrática" del Gobierno y anunció una concentración el 21 de noviembre en el cercano Monumento a la Revolución.

"Hoy levantamos temporalmente el campamento solo para fortalecer el Gran Despertar de México el próximo sábado 21 de noviembre y para encarar con renovado brío las nuevas medidas de presión hasta lograr que López (Obrador) renuncie a la Presidencia", expresaron.

Pese al anuncio del levantamiento, hecho el sábado por la noche, las tiendas de campaña siguen colocadas este domingo en el Zócalo con gente que entra y sale del campamento.

Este frente comenzó a popularizarse por las manifestaciones en automóvil que hacían cada fin de semana sus integrantes para protestar contra la gestión de la pandemia, que acumula un millón de contagios y casi 100.000 muertos en el país.

El 19 de septiembre trataron de llegar al Zócalo pero la policía lo impidió y decidieron acampar bloqueando el centro de la capital. Finalmente, el 23 de septiembre consiguieron autorización para instalarse frente al Palacio Nacional, residencia del presidente.

Aunque instalaron cerca de 300 tiendas de campaña, la gran mayoría de los protestantes dormía por la noche en sus casas y eran comunes las imágenes de tiendas volando por el viento.

"Que no sean solo las casas de campaña, sino que se queden ahí, que no se vayan a hoteles", se burló López Obrador, quien en 2006 lideró un inmenso campamento en el centro de la capital tras perder las elecciones presidenciales entre acusaciones de fraude electoral.

Según el comunicado, los acampados han sufrido la "creciente violencia" por parte de "reventadores pagados por el Gobierno para amedrentar", por lo que el Frena solicitó a la ONU que enviara "observadores internacionales".

De acuerdo con el Frena, una conspiración comunista orquestada por el Foro de Sao Paulo, que agrupa partidos latinoamericanos de izquierda, tiene dominada a México, por lo que exigen que López Obrador renuncie antes del 30 de noviembre, plazo límite para que se convoquen unas nuevas elecciones.

En el campamento instalaron una capilla y rezaron a diario para pedir a Dios y a la Virgen de Guadalupe la dimisión del presidente, del izquierdista Movimiento Regeneración Nacional (Morena).

El 6 de noviembre de 2021 los mexicanos están llamados a las urnas para renovar la Cámara de Diputados y 15 de los 32 gobiernos estatales en lo que ya se consideran las elecciones más grandes de la historia de México y en las que Morena parte como favorito.