Mario GALEANA  La creciente disposición y accesibilidad de las maquinitas tragamonedas para los niños constituye un factor de alto riesgo para el desarrollo de la adicción al juego, calificado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) entre el rubro de los desórdenes del hábito y el impulso, junto con la cleptomanía y la piromanía. Durante la pasada comisión permanente del Congreso del estado, el diputado Heraclio Germán Martínez Manzano aseguró que, inclusive, en la mayoría de los casos la delincuencia organizada opera en la instalación y uso de las mismas. El legislador citó, además, el informe que la Secretaría de Gobernación emitió a principios del pasado mes de marzo, donde se indica que las ganancias que generan a nivel nacional este tipo de artefactos, pese a estar prohibidas por la ley, alcanzan los 600 millones de pesos. “La creciente disposición y accesibilidad de las maquinitas constituye para los niños un factor de alto riesgo para el desarrollo del trastorno de adicción al juego, que conlleva a consecuencias económicas, personales y emocionales”, calificó. Al presentar un punto de acuerdo para exhortar a la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del estado a realizar operativos afuera de las escuelas y en tiendas, mercerías, papelerías y fruterías a fin de decomisar dichos artefactos, mismo que fue turnado a la Comisión de Seguridad Pública, el legislador aseguró que la adicción al juego que podría derivar de las mismas se refleja en inasistencias escolares, contraer deudas, vender sus posesiones y, “en los casos más graves, robo, intento de asesinato, suicidio y prostitución”. El punto de acuerdo también contempla un exhorto para que la Secretaría de Educación Pública (SEP) estatal realice campañas de prevención en los planteles acerca de la adicción al juego, añadió. “(Las máquinas tragamonedas) representan un peligro latente. Estudios aseguran que la adicción a ellas es considerada como la cocaína-crack de los juegos de apuestas. Es necesario que se consideren estos elementos derivados tras estos aparatos”, indicó durante su intervención. Cabe señalar que desde la primer quincena del mes de marzo, el delegado de la Secretaría de Gobernación (Segob) en Puebla, Noé Hernández Roldán, indicó que iniciarían los operativos para retirar dichas máquinas que operan en comercios, como lo son las tiendas y las papelerías, además de centros de entretenimiento y mercados. No obstante, después indicó que los operativos no iniciarían hasta que el gobierno federal diera la orden para realizar el decomiso de las mismas, por lo cual continúan usándose de manera cotidiana. |