| Catedráticos del Tec de Monterrey rechazan que el vocablo pueda ser utilizado para referirse a las uniones de parejas del mismo sexo Carlos ROCHA A pesar de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) legitimó las uniones legales entre personas del mismo sexo, a estos enlaces “no se les puede nombrar matrimonio, pues desde el punto de vista lingüistico y etimológico la palabra involucra sólo la unión de un hombre y una mujer”, refirió Francisco Díaz Estrada, catedrático del Departamento de Humanidades y Formación Ética del Tecnológico de Monterrey, campus Puebla. Durante la presentación del discurso Matrimonios del Mismo Sexo: Una Visión Científica e Interdisciplinaria, el académico recordó que el filósofo Tomás de Aquino desglosó la palabra matrimonio como mater-munien, la cual tiene que ver con la defensa de la mujer ante un hombre. Otra raíz de la palabra matrimonio, ilustró, tiene que ver con mater-nato, misma que refiere a la tutela de un nacido, es decir, un hijo. Por ello, el especialista hizo un llamado para evitar que se continúe con el nombramiento de matrimonio a la unión entre personas del mismo sexo, debido a que se puede convertir en un error gramatical que no tendrá remedio. “Para mí sería un error, e incluso una aberración intentar seguir llamando matrimonios del mismo sexo, lo más común sería llamarles sociedades de convivencia o unión de personas del mismo sexo, pero ya no se puede legislar como matrimonios del mismo sexo”, advirtió. En suma, previó que el próximo paso que darán las personas del mismo sexo unidas por la vía legal es solicitar la adopción, por lo cual es necesario frenar el error semántico. Por su parte, Arán García Sánchez, catedrático del Departamento de Derecho y Ciencia Política, explicó que la Suprema Corte no interpretó el concepto de matrimonio, sino lo que había en la Constitución. “En la Carta Magna no hay un concepto de matrimonio, por eso se interpretó así para la resolución de los amparos a favor de las personas del mismo sexo que buscan casarse”, aclaró al tiempo que dijo que quedaron vacíos legales y falta de definiciones en la Constitución. Cabe señalar que esta misma aseveración sobre la palabra matrimonio la retoma la Iglesia católica, pues apunta que entre los cristianos sólo es aceptada la unión entre hombre y una mujer. El vocero de la Arquidiócesis de Puebla, Dante Pimentel Aguilar, lamentó la determinación de la SCJN y aclaró que la Iglesia trabajará con los fieles católicos, quienes por naturaleza saben que para procrear se necesita una pareja de diferente sexo. |
