Ven imposible cumplir a 100% recomendaciones de Conavim
El gobierno de Puebla no tenido apertura para incluir a activistas y a universidades en el combate a la violencia de género
Ni por tiempo, ni por apertura hacia las organizaciones ni por el tamaño de Puebla, el gobierno del estado podrá cumplir en 100 por ciento las recomendaciones de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), consideraron activistas sociales. Este lunes, El Popular, diario imparcial de Puebla difundió que a un mes de concluir el plazo de las 11 recomendaciones que Conavim hizo al gobierno de Puebla para evitar la alerta de género por el alto número de feminicidios, faltan por cumplirse 7 mientras que hay 4 más en trabajos parciales. Si bien estas recomendaciones se hicieron en junio y se dio un plazo de medio año para cumplirlas, en el caso de esta administración pesará el haber ignorado el tema por todo un sexenio, advirtió Gabriela Cortés Cabrera, integrante de la asociación civil El Taller, dedicada a la defensa de los derechos de las mujeres. Para la activista, el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas evadió la violencia desde el inicio de su administración. "No pueden hacer una investigación en tan corto tiempo, ¿Desde qué año se les ha venido diciendo lo de la violencia hacia las mujeres?". La activista recordó cómo a los pocos meses de haber asumido el cargo, diversos grupos hicieron un llamado al mandatario para que revisara cifras preocupantes heredadas por su antecesor, Mario Marín Torres, sin que hubiera respuesta.
Al paso de los años, la advertencia que se le hizo a Moreno Valle quedó rebasada y ahora, más que desapariciones, lo que alerta a la entidad son los feminicidios. La ignorancia que muestra el gobernador, lamentó Cortés Cabrera, se demuestra de manera simple en sus discursos, pues sólo una vez ha pronunciado el término que refiere al asesinato de mujeres por razones de género. Sobre los avances que pueda tener el cumplimiento de las 11 recomendaciones del Conavim, agregó, diferentes organizaciones han coincidido en que no han sido consideradas por lo que se corre el riesgo de ofrecer un versión gubernamental. "En realidad, ¿a qué organizaciones de la sociedad civil tomaron en cuenta para sus parámetro? Las organizaciones tenemos otra postura ante los diferentes tipos de violencia, porque hay muchísimos tipos de violencia que no son considerados tampoco". Asimismo, destaca el hecho de que no queda clara una herramienta de medición de la violencia que pueda aplicarse a un estado con la geografía de Puebla. Desdeñan la experiencia universitariaAdemás, el gobierno de Puebla ha dejado fuera a universidades como la Iberoamericana (Ibero Puebla), pese a que dicha institución cuenta con un área de estudio sobre violencia contra la mujer y a que la Conavim recomendó incluir a universidades públicas y privadas en el diseño de una estrategia para detectar y prevenir las agresiones en las instituciones de educación. Se trata del Observatorio de Violencia Social, explicó el rector Fernando Fernández Font, el cual ni la Secretaría General de Gobierno (SGG) ni otra dependencia ha buscado para dialogar, a lo que –aseguró– están abiertos.
Dejar de lado el trabajo tanto de la Universidad Iberoamericana como de otras universidades que realizan investigación en el tema de violencia de género, opinó, es un error de la administración estatal encabezada por Rafael Moreno Valle. Una de las riquezas de la entidad, mencionó, es la variedad y calidad de los centros de estudio, que se caracterizan además por el desarrollo de investigación en temas sociales. "El riesgo es muy claro yo creo que la universidad tiene una potencia intelectual y académica, es la inteligencia de un país. ¿Dónde están las reflexiones? ¿Dónde se están discutiendo los problemas más serios? Es en las universidades y si éstas se dejan de lado me parece que se está perdiendo una gran oportunidad". Desconocen programas de prevención de la violenciaAunque la violencia de género es un tema en el que el gobierno del estado debe prevenir, mujeres de diferentes edades reconocieron en un sondeo, que la atención a sus denuncias es mala y los programas no son conocidos. Una mujer de 31 años de edad que pidió el anonimato, relató su caso. Sabía por información difundida por autoridades sobre la importancia de denunciar si era víctima de violencia de género; pero cuando sufrió golpes y lo hizo, no tuvo una buena respuesta. Hace un año, recordó, recurrió a las oficinas del Ministerio Público en la zona suroriente de la ciudad, donde la atención se prolongó por más de tres horas y se topó con falta de tacto de los funcionarios. "Me tardaron… Te valoran los golpes, me mandaron al hospital… No saben. Falta que se pongan en los zapatos de una". Una vez que logró presentar su denuncia, agregó, padeció cambios de dirección de oficinas y retrasos en los procesos de su expediente, que finalmente la llevaron a desistir de realizar un seguimiento de su propio caso.
Wendy Prisco Ramírez de 28 años de edad, afirma que conoce bien la información sobre qué hacer para denunciar en caso de padecer violencia de género; sin embargo, considera que esta no es funcional. Para ella, es la misma ciudadanía quien no tiene interés en acercarse a esos esquemas de atención a la violencia de género que proponen las autoridades de gobierno. "La gente dice ¿para qué voy si me van a tardar horas? Desgraciadamente así somos". Aunado a estas dos mujeres que identificaron el tema de la denuncia como una opción, otras más entrevistadas de diferentes edades reconocieron no haber escuchado sobre ningún programa ni sobre cómo reaccionar ante un caso de resultar víctimas. Tal es el caso de Julieta Vent Camacho, de 72 años y Juliana Aguilar Caballero, de 17 años, quienes reconocieron no tener información. Quienes desconocen programas y opciones de denuncia coincidieron en que contar con esta información es importante para cualquier mujer, pues puede estar expuesta a la violencia.
|