Más del 50 por ciento del recurso proveniente del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS) se invirtió en las Zonas de Atención Prioritarias (ZAP) Urbanas y poco más del 1 por ciento en las Rurales, de un monto total de 4 mil 806 millones de pesos ejercidos con corte a enero del 2017. 

Aunque las ZAP Rurales son las que tienen mayor grado de marginación, según consta en el propio listado publicado en el Diario Oficial de la Federación, a éstas apenas se les destinaron 59 millones 394 mil pesos, mientras que a las Urbanas 2 mil 489 millones de pesos y a otros componentes regionales un monto de 2 mil 190 millones de pesos.

De acuerdo con el reporte de uso del FAIS 2016 en Puebla, el recurso se invirtió en dos componentes: en total, 4 mil 313 millones 821 mil pesos para el Fondo de Infraestructura Social Municipal (FISM) y 595 millones de pesos en el Fondo de Infraestructura Social Estatal (FISE).

Para 5 mil 506 proyectos de alimentación, vivienda, conectividad, salud, educación y servicios básicos, se invirtieron de manera directa 3 mil 451 millones de pesos, de forma complementaria a otras acciones se destinaron mil 272 millones de pesos y de manera especial casi 15 millones; sin embargo, no se detallan los proyectos ni la clasificación de los mismos.

El estado reportó que usó el FISM para los proyectos de agua y saneamiento por un monto de mil 885 millones de pesos; para educación 606 millones de pesos; para salud 283 millones de pesos; para urbanización 698 millones de pesos; para vivienda mil 224 millones de pesos, mientras que en otros proyectos se emplearon 40 millones de pesos.

En el componente que corresponde al Fondo de Infraestructura Social para las Entidades Federativas, las prioridades se concentraron en proyectos de agua y saneamiento por 202 millones de pesos; en salud, 144 millones de pesos; vivienda y urbanización cerca de 95 millones y educación 38 millones de pesos.