Cambian nieves por víveres en el zócalo

En la ciudad de Puebla la familia Cano Torres dejó su zona habitual en Los Sapos y El Carmen, en donde todos los días ofrecen nieves, helados y aguas de sabor, para hacer lo mismo pero en el primer cuadro de la ciudad y con una finalidad diferente, ayudar a los damnificados de Puebla tras el sismo de 7.1 grados ocurrido en la entidad el pasado 19 de septiembre.

Su línea de botes naranjas ubicados en la esquina de la 16 de Septiembre y la 3 Oriente resaltaban entre los ciudadanos que llegaban, ya sea para colaborar en los centros de acopio o para observados los estragos del movimiento telúrico.

Alejandra Cano Torres fue quien encabezó la venta de los productos refrescantes en el grupo de sus primos, cuñadas y hasta los más pequeños del hogar, todo con el objetivo de poder mover los corazones de los poblanos ante un hecho que ha traído la muerte para algunas familias.

Cano Torres explicó que desde las 10 horas, junto con sus consanguíneos, comenzaron a ofertar helados, aguas y nieves a cambio de donativos voluntarios de las personas que llegaran a este punto de la ciudad, la finalidad era acumular dinero para comprar artículos de primera necesidad así como alimentos para después entregarlos a los centros de Acopio.

Agregó que su idea surgió luego de observar como a la gente le daba pena traer pocas cosas al centro de acopio ubicado en el Zócalo, entonces, analizando la situación consideraron que lo ideal sería comercializar sus productos a cambio de donativos voluntarios, sin importar si fueran pequeños.

Agregó que este 21 de septiembre fue el primer día que comenzaron a vender; sin embargo, toda su familia estuvo de voluntaria en el centro de acopio del Zócalo de la capital poblana, pero después tuvieron la idea de ofrecer sus productos "de todo corazón".