A los 14 años empezó a ingerir alcohol y a los 26 tuvo su primer acercamiento con las drogas. Fernando Zamudio de 55 años de edad relata que sus adicciones hicieron que perdiera su trabajo, a sus amigos y a su familia; sin embargo, con rehabilitación y fuerza de voluntad salió de sus problemas, y en la actualidad ayuda a la Fundación Sentido en la prevención de adicciones para jóvenes. La fundación se constituyó el 19 de septiembre de 2014 como una Asociación Civil sin fines de lucro que busca transformar la realidad en la que viven muchos jóvenes, creando consciencia a través de testimonios y brindando apoyo profesional por medio de terapeutas especializados en el tratamiento. Se dedica a prevenir y atender situaciones de riesgo en adolescentes, de manera principal en el embarazo a edad temprana, bullying, cutting (cortes en la piel), drogadicción y alcoholismo.
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El trabajo de Fernando consiste en platicarles su vida a los jóvenes y con sus vivencias, evitar que otras personas caigan en algún tipo de adicción. "Yo me rehabilité hace muchos años, pero es un proceso que nunca termina. Con la finalidad de ayudar a la gente que tenga problemas o pueda llegar a tenerlos, trabajo de la mano con la fundación, doy testimonios para que los jóvenes no caigan en lo que yo caí", relató a El Popular, diario imparcial de Puebla. Las pláticas son impartidas a niños y niñas desde los 12 hasta los 20 años de edad, asisten a secundarias, preparatorias y universidades. En entrevista, explicó que se enfoca en los jóvenes porque prevenir es la mejor estrategia para alejar a alguien de las drogas.
"Es mejor prevenir que corregir, si yo tengo un hijo prefiero ayudarlo, contarle y alejarlo antes de que caiga y sea más difícil. Hay muchos focos de alerta en la adolescencia y es ahí cuando los padres deben ayudarlos, cuando están propensos", comentó.
Fernando sugiere a los padres de familia detectar las diferentes facetas que pasan sus hijos y si se deprimen con facilidad, están irritados la mayoría del tiempo o si están inconformes con su vida actual es recomendable llevarlos con un especialista. Los jóvenes al ser susceptibles pueden aceptar con facilidad consumir drogas de un extraño o tomar bebidas alcohólicas.
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