Por la desaparición de sus hijos y carecer del apoyo del gobierno así como de los nulos avances en la investigación de la Procuraduría General de la República (PGR) se llevó a cabo en la capital poblana la caravana Rompiendo el Silencio y el Olvido, encabezada por algunos de los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa. Este año se dividió en tres contingentes, uno en el norte del país, otro en el sur y otro en la zona del Bajío. El objetivo fue difundir la historia de los estudiantes en el territorio mexicano y exigirle al Gobierno Federal avances en la investigación por la desaparición forzada de los 43 estudiantes de la escuela normal de Ayotzinapa "Isidro Burgos". Durante la marcha, los participantes corearon "vivos se los llevaron y vivos los queremos"; exigieron castigo para el exgobernador de Guerrero, Ángel Aguirre Rivero, pues a los jóvenes se les vio por última vez en Iguala la noche del 26 de septiembre de 2014. Además, pidieron prisión para todos los miembros del Ejército Mexicano, la Policía Federal, ministeriales y agentes municipales que estuvieron coludidos en la desaparición de los estudiantes. Al evento llegó un aproximado de 100 personas que gritaban por la calles del Centro Histórico: "Queremos recuperar los 43 sueños y ocupar las 43 butacas que estaban en la normal, se fueron 43 vidas por eso no queremos un carpetazo". Previo a la marcha, los miembros de la caravana dieron a conocer que no van a permitir que el caso se olvide cuando Enrique Peña Nieto, actual presidente de México deje la presidencia; y aseguraron que no apoyarán a ningún partido político en este año electoral, pues cuando ocurrió la desaparición hubo indiferencia por parte de todos los candidatos. Aprovecharon para anunciar que el 17 y 18 de marzo se llevará a cabo la sexta convención por Ayotzinapa en la Ciudad de México, invitaron a todas las organizaciones a unirse, para exigirle a las autoridades que esclarezcan el hecho ya que en el mes de abril, los jóvenes cumplen 43 meses de estar desaparecidos.
|