Carecen 8 de cada 10 poblanos de bienestar social

Casi ocho de cada 10 poblanos tiene carencias que limitan su nivel de calidad de vida, lo que coloca a Puebla entre las nueve peores entidades en garantizar a sus ciudadanos condiciones idóneas para un bienestar social, lo que involucra ingresos, educación, salud y vivienda.En la presentación del Índice de Bienestar (IBS) 2016, elaborado por investigadores de la Universidad Iberoamericana, se advierte que en Puebla, el 78.3 por ciento de su población tiene un nivel inadecuado de bienestar, es decir, no goza de una estabilidad económica ni social que le permita vivir de manera plena.

En la explicación del IBS, Miguel Reyes Hernández, académico de la Universidad Iberoamericana, informó que en México, solo el 25 por ciento de los habitantes tiene garantías de bienestar social, siendo Aguascalientes, Nuevo León, Coahuila y Ciudad de México, los estados en donde la población se encuentra por arriba del umbral mínimo de bienestar.

Por su parte, Guerrero, Oaxaca y Chiapas son las entidades con la peor calidad de vida, ya que en la mayoría de los aspectos evaluados, resultaron por debajo del promedio. Tan solo en Guerrero, el 95 por ciento de su población presenta condiciones de vida deplorables.

En Puebla, el investigador universitario advirtió que solo el 16.2 por ciento de los poblanos tiene acceso a créditos bancarios y/o hipotecarios, es decir, 83.8 por ciento no cuenta con posibilidades de ser usuario de la banca, esta cifra coloca a Puebla a la par de estados como Hidalgo, Zacatecas y Estado de México.

Al revisar las condiciones de vida libre de violencia, se observó que en 2016, al 88 por ciento de los poblanos se les garantizó seguridad, no obstante, Miguel Reyes, indicó que en la actualidad, el escenario ha cambiado.

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En materia de ingresos, el 81.3 por ciento de la población no tiene un nivel adecuado de ingresos económicos, en este sentido, apenas el 18.7 por ciento tienen posibilidad de gozar de una vida digna con una suficiente percepción económica.

Para lograr estos resultados, se midieron factores como: seguridad alimentaria, educación, vida libre de violencia, vivienda, activos básicos, seguridad social, servicios básicos, ingresos y acceso a la salud así como al crédito, cuyo enfoque fue realizado con base en los derechos humanos, normas y leyes existentes, dejando de lado la satisfacción personal de la población.