David Báxim, 40 años de elaborar tabaco a mano

Su apellido significa “águila vaquera” y le hace honor cada día al crear un producto controversial

Su apellido significa "águila vaquera" y le hace honor cada día al crear un producto controversial, que si bien en Puebla nunca ha estado prohibido, con el tiempo han crecido más las restricciones para su consumo.

David Bàxim Velazco lleva más de 40 años haciendo tabaco, un producto que aprendió a elaborar en su natal Veracruz; aunque al principio su introducción al puro fue por necesidad, hoy en día es su sustento, su forma de vida y una tradición que ha dejado a sus familiares.

En la calle 5 Oriente del Centro Histórico se puede encontrar un pequeño local en donde Báxim elabora el tabaco a mano.

"Aprendí desde los 15 años, yo vengo de San Andrés Tuxtla, en Veracruz. Ahí se siembra el tabaco, es una actividad económica importante, entonces desde niños nos mandaban al campo y sabíamos que nuestro destino era trabajar haciéndolo," compartió.

Considera que en comparación con años anteriores, la venta de tabaco sigue siendo la misma, ya que sus compradores son constantes: "el tabaco es una forma de vida, una distracción. La gente que fuma tabaco del bueno siempre sigue regresando, y no sólo los que fuman seguido es una tradición que cuando nace un bebé vengan por ellos para regalárselo a sus amigos. También en bodas compran el servicio y en sus eventos se elaboran puros," comentó.

Fotos: Karen Rojas

Los hombres son los que más buscan el tabaco, pero también hay mujeres que disfrutan el olor y el sabor de estos productos. Aceptó que en su mayoría, son personas de clase media alta las que le compran, ya que su precio, a diferencia de una cajetilla de cigarros, es más elevado.

"El puro es de un costo elevado, hay compradores nuevos que vienen a probar la sensación, pero los que ya lo hacen desde hace tiempo guardan su dinero para comprarlos. Su precio varía desde los 40 hasta 150 pesos, precio unitario, pero hay una serie de puros que son tipo cigarrillos, y son los que sugiero si quieren empezar a probar," señaló.

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A lo largo de este tiempo han aumentado las campañas para evitar el consumo del tabaco, y el espacio donde trabaja el señor David no es la excepción, ya que las autoridades les han dado indicaciones de poner anuncios en donde les avisan a los fumadores los riesgos de consumirlo en exceso.

"Piden que pongamos esas leyendas. Al principio nos parecía ridículo, porque es una tabaquería y no vamos a venderles a menores de edad, pero lo aceptamos. Hubo una época que nos afectó, pero como lo decía anteriormente los que son clientes fieles, siempre regresan," indicó.

Hoy su trabajo le da la oportunidad de viajar mucho, ya que la empresa para la que trabaja ofrece servicio de banquetes y ha podido conocer Cuernavaca, Acapulco, San Miguel Allende, Tijuana y Mérida. A veces pensó que esta labor iba a terminar con él; sin embargo, ahora su hijo también se dedica a esta profesión, y espera que sus nietos también lo hagan para que nunca se pierda la tradición.