2019: Un año de turbulencia política
La muerte de Martha Erika Alonso marcó un año complicado para Puebla, entre un gobierno interino y la llegada de Miguel Barbosa
A escasos días del fallecimiento de la gobernadora en funciones Martha Erika Alonso y su esposo, el ex mandatario Rafael Moreno Valle, arrancó el 2019, con un gobierno interino que administraría la convulsión política y con un nuevo proceso electoral de cara a las elecciones extraordinarias de junio. Al gobierno de Guillermo Pacheco Pulido le tocaría, además de concluir alrededor de 48 obras pendientes, implementar la Alerta de Género para 50 municipios de la entidad y crear mediante un decreto la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas; 2019, sin embargo, concluyó como uno de los más violentos para las mujeres poblanas y sin titular de la Comisión Local. En su primer acto como gobernador, Miguel Barbosa Huerta compartió públicamente dos cifras controversiales: que la deuda pública del estado asciende a 44 mil millones de pesos y que del presupuesto de más de 91 mil millones de pesos sólo quedaban 600 para terminar el año. Puedes leer: Deberán reemplacar 14 mil 500 unidades del transporte públicoAunque el delegado del Gobierno Federal en Puebla, Rodrigo Abdala, aseguró a mediados de octubre que no existían retrasos en la entrega de los programas de bienestar, las molestias de los beneficiarios por las largas filas y horas no se hicieron esperar, lo que se agregó al clima turbulento de estos últimos meses. En la capital del estado, cuyo gobierno ha sido criticado por su falta de planeación por algunas cámaras empresariales y los políticos de oposición, el malestar provino de la percepción de inseguridad y sobre todo, del subejercicio presupuestal que a veinte días de concluir el año, aseguró el tesorero municipal Armando Morales Aparicio, ascendía a mil 313 millones de pesos. La administración estatal tampoco se salvaría de las críticas, pues acciones emblemáticas que deberían estar cumplimentadas para estas fechas, tuvieron que ser aplazadas o modificadas. Con el poco presupuesto disponible, se dispuso el arrendamiento de mil nuevas patrullas, compra de armamento y preparación de nuevos elementos. Fue hasta el 16 de diciembre y tras malentendidos con la empresa a cargo del arrendamiento, Lumo Financiera del Centro, que el mandatario podría finalmente dar el banderazo de salida a las primeras 250 unidades. A esto se sumaría el descontento generado primero por el alza en el pasaje, de 6.00 a 8.50 pesos, y el reemplacamiento obligatorio para 2020.
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