Como era de esperarse, la apertura parcial de tres calles del Centro Histórico de Puebla ocasionó un aumento en la movilidad de vehículos y peatones.

Las calles como Reforma, 2 Oriente-Poniente y la 4 Poniente, presentaron carga vehicular así como un importante número de personas caminando aun cuando la mayoría del comercio no esencial permaneció cerrado.

Decenas de automovilistas que deben atravesar el corazón de la ciudad para llegar a sus destinos agilizaron sus recorridos al ver que en estas calles ya no había patrullas de la Secretaría de Seguridad Ciudadana obstruyendo el paso.

Esto, provocó que por momentos se registrarán largas filas de autos que se generaban principalmente en horas pico.

En este recorrido realizado por El Popular, diario imparcial de Puebla se pudo observar que al menos este lunes 13 de julio el flujo vehicular y de personas incrementó, aunque no se comparó al registrado el pasado fin de semana en donde hubo aglomeraciones en diversos espacios públicos como el Paseo Bravo y el zócalo de la ciudad.

En algunos tramos como avenida Reforma a la altura de la 3 Sur permaneció un dispositivo para permitir solo el paso a ciudadanos que se dirigían a las cajas recaudadoras de la Tesorería Municipal así como bancos y estacionamientos.

Por lo tanto, la afluencia peatonal fue en ascenso, sobre todo en los lugares donde se concentran bancos, zócalo de la ciudad e inmediaciones de la Catedral de Puebla.

En cuanto a la apertura parcial de 500 negocios esenciales en el primer cuadro de la ciudad, se pudo notar que la mayoría permanecen cerrados, mientras que locales abiertos cumplen sólo con el servicio para llevar y acatando todas las medidas sanitarias.

En algunos casos, se observaron trabajadores promoviendo sus menús de comida tradicional, de temporada, postres y snacks a las afueras de los establecimientos.

Mientras que otras personas aprovecharon su paso para ocupar espacios en el zócalo o incluso, tomarse fotografías de recuerdo.