De acuerdo con el último diagnóstico nacional de supervisión penitenciario realizado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) la gran mayoría de las cárceles en el estado de Puebla se encuentran en graves condiciones.

Lo anterior formó parte de la exposición del diputado de Partido Acción Nacional (PAN), Raúl Espinosa Martínez, como parte de su punto de acuerdo donde se exhortó a la Secretaría de Seguridad Pública del estado a reforzar las medidas sanitarias, de desinfección y sanitización implementadas en el centro penitenciario de Chignahuapan.

En la sesión virtual de la comisión permanente, el legislador puntualizó que de los 12 centros penitenciarios que se encuentran en el estado solo uno está en óptimas condiciones, mientras que los otros 11 tienen problemas de gobernabilidad, hacinamiento y falta un trato humanitario, seguridad y de salud.

Recordó que, en dicho diagnóstico de la CNDH, la entidad obtuvo una calificación de 6.03 debido a que no se respetan los derechos humanos de las personas privadas de su libertad, ni tampoco se cuentan con las condiciones necesarias para que dichas personas tengan una adecuada reinserción social y de salud.

Agregó que los problemas de salud se han complicado más por la pandemia del coronavirus, que ha puesto en riesgo a todas las personas, sin que sean ajenas a ello aquellos que se encuentran privadas de su libertad en los centros penitenciarios.

Informó que en Puebla se han detectado un número considerable de personas infectadas y de múltiples muertes por Covid-19, en avance de que en las cárceles poblanas ocurre con una frecuencia promedio de casi dos contagios al día y un fallecimiento cada 5 días a pesar del confinamiento constante.