Al calificar a las próximas elecciones como uno de los mayores retos cívicos y logísticos que jamás haya enfrentado el país, el diputado federal por el Distrito 12 de la ciudad de Puebla, Fernando Manzanilla, consideró necesario iniciar cuanto antes una discusión seria, ordenada e institucional sobre la viabilidad de realizar la elección en medio de una emergencia sanitaria.

Pidió establecer los criterios técnicos a considerar para identificar cuáles son las condiciones mínimas de seguridad sanitaria necesarias para realizar el proceso electoral en cada estado.

“El próximo 6 de junio tendremos las elecciones intermedias más grandes de la historia. Se renovará completamente la Cámara de Diputados y se elegirán 15 gubernaturas estatales, 30 congresos locales y mil 900 ayuntamientos y juntas auxiliares”, precisó.

Dijo tener claro que el Instituto Nacional Electoral (INE) se está preparando para garantizar un proceso electoral seguro, en términos de salubridad, siempre y cuando las condiciones de riesgo sanitario lo permitan. Pero ¿qué pasaría en caso de que las cosas no mejoraran y que la situación de la pandemia se llegara complicar?

Presentó un exhorto a las juntas de Coordinación Política de la Cámara de Diputados y del Senado de la República para diseñar, de manera coordinada, una ruta institucional que evalúe los factores determinantes de la viabilidad de la jornada electoral durante un periodo de contingencia sanitaria.

En ese mismo punto de acuerdo, presentado en la Cámara de Diputados, también ha pedido que se convoque la participación en esta discusión de la Secretaría de Salud, la Secretaría de Gobernación y el Instituto Nacional Electoral, así como de instituciones académicas y expertos en salud, derecho electoral y constitucional.

Pidió que se presente ante la opinión pública un informe técnico en marzo de este año, sobre los requisitos y condiciones de salubridad mínimas básicas para realizar el proceso electoral, así como la ruta constitucional y legal para una posible modificación de las fechas de realización del proceso.

Resaltó que el INE tiene prevista la instalación de 163 mil casillas en todo el territorio nacional y la contratación de 50 mil supervisores y capacitadores electorales que se encargarán de preparar a los casi millón y medio de ciudadanos que fungirán como funcionarios de casilla.