*El cadáver y el camión de transporte fueron hallados en una barranca ubicada en los límites entre Santa María Xonacatepec y la colonia 2 de Marzo  Víctor HERNÁNDEZ Indignación y consternación hay en el gremio del transporte público, tras el asesinato a sangre fría de un chofer de la ruta Libertad-Cuauhtémoc, quien junto con su unidad fue arrojado a una barranca ubicada en los límites entre Santa María Xonacatepec y la colonia 2 de Marzo. Con las diligencias de la fiscalía de homicidios se determinó que al operador lo sofocaron con una franela, con la cual además lo amordazaron. La mañana de ayer, choferes de dicho derrotero pararon labores, no sólo para exigir a las autoridades el esclarecimiento del asesinato, sino también para protestar contra el dueño de la concesión, quien se negaba a pagar los gastos funerarios de su trabajador. El concesionario terminó aceptando pagar la cantidad de 80 mil pesos, suma que la familia considera insuficiente. El martes en la noche, personal de la Policía Auxiliar de La Resurrección encontró en una barranca ubicada en la carretera a dicho lugar y el antiguo camino a Xonacatepec, en el paraje Montserrat, el camión marcado con el número económico 03 de la ruta Libertad-Cuauhtémoc. Al descender y revisar el interior de la unidad, se encontró una licencia de conducir a nombre de Daniel Hernández Pérez, de 39 años, quien había sido reportado como desaparecido desde temprano. Su esposa, Érika Luna Martínez, señaló que el martes, aproximadamente a las 6:00 horas, Daniel salió de su domicilio ubicado en la colonia San Diego Manzanilla, para irse a trabajar como chofer de la ruta mencionada, pero no regresó a la hora que debía y empezaron a buscarlo. El dueño del camión señaló que también le habían perdido el rastro y que incluso no había regresado con la unidad, situación que les resultó preocupante y que derivó en un reporte a la policía. Luego de localizar el camión, se implementó una búsqueda en la misma barranca y a unos cuantos metros se halló el cadáver amordazado con una franela, que según las investigaciones, le provocó la muerte por sofocamiento. Entre sus pertenencias, el ahora occiso conservaba su cartera, pero estaba vacía, lo que hace suponer que lo asaltaron. No obstante, la fiscalía no ha descartado otras líneas de investigación, una de ellas, la que apunta a una posible venganza por problemas de tipo personal, aunque su concubina asegura que no era conflictivo