Amnistía Internacional investiga muerte de reos
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**La Comisión Nacional de los Derechos Humanos también alzó la voz de protesta por el incidente en el que murieron 44 internos Agencia El Universal 
MÉXICO, DF.- Los incidentes violentos en tres eventos en cárceles mexicanas en Nuevo León y Tamaulipas, con un saldo de 78 reos que perdieron la vida en lo que va del año, provocaron la reacción de Amnistía Internacional (AI), que demandó al gobierno mexicano una investigación exhaustiva en torno a la muerte de reos en penales estatales, mismos que calificó de asesinatos. La organización internacional se sumó así a la exigencia de las Naciones Unidas (ONU) porque se esclarezcan los hechos y se castigue a los responsables de estos decesos. En un comunicado que encabezó: "Amnistía Internacional llama a las autoridades mexicanas a investigar asesinatos en reclusorios", indicó que las autoridades tienen el deber y la obligación de garantizar que las condiciones de reclusión en los centros penitenciarios mantengan un adecuado nivel de seguridad y respeto a la integridad de los reclusos de conformidad con los estándares internaciones en materia de condiciones de reclusión, como las Reglas mínimas para el tratamiento de los reclusos de las Naciones Unidas. Señaló que "las autoridades mexicanas deben conducir una investigación exhaustiva e imparcial con relación a los lamentables acontecimientos que tuvieron lugar el 19 y 21 de febrero durante los cuales 44 personas perdieron la vida en el Penal de Apodaca y tres más en el de Topo Chico respectivamente", ambos ubicados en el estado de Nuevo León. Expuso que AI deplora y lamenta el fallecimiento de estas personas bajo custodia de las autoridades "y considera esencial que la investigación esclarezca la verdad sobre lo ocurrido y asegure el derecho de los familiares a información y justicia". Es de igual importancia, indicó, "que se aclaren los hechos que antecedieron a esta pérdida de vidas, la fuga de más 30 presos, y que quienes resulten responsables, incluidas autoridades penitenciarias, rindan cuenta ante la justicia". La organización recordó que este incidente se suma al ocurrido el 4 de enero en Altamira, Tamaulipas, cuando al menos 31 presos perdieron la vida durante un altercado entre grupos rivales.
MÉXICO, DF.- Los incidentes violentos en tres eventos en cárceles mexicanas en Nuevo León y Tamaulipas, con un saldo de 78 reos que perdieron la vida en lo que va del año, provocaron la reacción de Amnistía Internacional (AI), que demandó al gobierno mexicano una investigación exhaustiva en torno a la muerte de reos en penales estatales, mismos que calificó de asesinatos. La organización internacional se sumó así a la exigencia de las Naciones Unidas (ONU) porque se esclarezcan los hechos y se castigue a los responsables de estos decesos. En un comunicado que encabezó: "Amnistía Internacional llama a las autoridades mexicanas a investigar asesinatos en reclusorios", indicó que las autoridades tienen el deber y la obligación de garantizar que las condiciones de reclusión en los centros penitenciarios mantengan un adecuado nivel de seguridad y respeto a la integridad de los reclusos de conformidad con los estándares internaciones en materia de condiciones de reclusión, como las Reglas mínimas para el tratamiento de los reclusos de las Naciones Unidas. Señaló que "las autoridades mexicanas deben conducir una investigación exhaustiva e imparcial con relación a los lamentables acontecimientos que tuvieron lugar el 19 y 21 de febrero durante los cuales 44 personas perdieron la vida en el Penal de Apodaca y tres más en el de Topo Chico respectivamente", ambos ubicados en el estado de Nuevo León. Expuso que AI deplora y lamenta el fallecimiento de estas personas bajo custodia de las autoridades "y considera esencial que la investigación esclarezca la verdad sobre lo ocurrido y asegure el derecho de los familiares a información y justicia". Es de igual importancia, indicó, "que se aclaren los hechos que antecedieron a esta pérdida de vidas, la fuga de más 30 presos, y que quienes resulten responsables, incluidas autoridades penitenciarias, rindan cuenta ante la justicia". La organización recordó que este incidente se suma al ocurrido el 4 de enero en Altamira, Tamaulipas, cuando al menos 31 presos perdieron la vida durante un altercado entre grupos rivales. 
