Familia, sin apoyo por menor ahogado

Familia, sin apoyo por menor ahogado
Padres de joven ahogado, aún sin apoyos Familia, sin apoyo por menor ahogado

La vecindad Podcast

Memorias del Crimen

El domingo pasado, el adolescente Alfredo G acudió al centro recreativo Los Ahuehuetes y falleció en un manantial de 5 metros de profundidad; el lugar continúa en operaciones Alma CAMARILLO Corresponsal Padres de joven ahogado, aún sin apoyosEl pasado domingo la tragedia llegó a la vida de una familia de Santa Isabel Cholula. El joven Alfredo G perdió la vida ahogado al interior del balneario Los Ahuehuetes, ubicado en Tepeojuma. El adolescente de 17 años había acudido con amigos y familiares a pasar un momento de diversión. Así, decidió meterse a un manantial, el cual tiene 5 metros de profundidad y cuya única advertencia sobre su peligro es un pequeño letrero; Alfredo ya no salió con vida. A decir de los acompañantes del joven —primos y conocidos—, el sitio no tiene salvavidas y los únicos vigilantes del lugar son dos adultos mayores, individuos que casi llegan a los 70 años; ninguno se atrevió a entrar al agua para sacar al adolescente. Guadalupe R, madre del fallecido, relata que estaba al tanto de que su vástago saldría a pasar el fin de semana en un balneario. Ella se encontraba en su domicilio en Santa Isabel Cholula cuando fue notificada sobre el accidente. De inmediata salió de su hogar con dirección al municipio de Izúcar de Matamoros, pero sólo fue para encontrar a su hijo sin vida. “Yo estaba enterada de que se iban a un balneario, después me llamaron, que estaban en Matamoros. Mi hijo iba a cumplir 18 años en septiembre… me querían dar 3 mil pesos y a ver qué se arreglaba, pero eso no me lo regresa. “Ellos tienen toda la obligación, como cuando un maestro le tiene que dar a los alumnos la clase y si alguien no la entendió repetirlo una y otra vez. Así ellos, tienen que alertar a los jóvenes que van a su balneario de que ese manantial está profundo, que es peligroso. Sólo tienen un letrerito que dice que mide 5 metros de profundidad y nada más. “Así me pongan el tesoro del mundo no me devuelven la vida de mi hijo, lo que quiero es que esto no se vuelva a repetir”, lamentó. Una historia negra El deceso de Alfredo G no es el primero que se registra al interior del balneario Los Ahuehuetes. De acuerdo con información extraoficial, el negocio pertenece a una cooperativa, ello ha originado que al haber tantos “propietarios” nadie responda en caso de accidentes. Pese a lo ocurrido el fin de semana, el inmueble no ha cerrado sus puertas ni recibido sanción alguna por parte del Ayuntamiento. Sigue en funciones en vísperas del Sábado de Gloria. Por su parte, Alfredo G, padre del adolescente fallecido, exige a las autoridades que se redoble la vigilancia en estos lugares, que se sea más estricto con las medidas de seguridad. “Cobran una entrada y no es posible que los dejen morir solos si saben que es profundo y que allí está naciendo el agua. Deben tener cuidado con este balneario de Los Ahuehuetes, no es un lugar seguro”, apuntó.