Chafirete corta vida de conductor

El cadáver quedó prensado entre los fierros, el asiento y tablero de una Oldsmobile Silhouette; el responsable se dio a la fuga Víctor HERNÁNDEZ La mañana de ayer, las condiciones de clima y la imprudencia de un operador del transporte público cobraron la vida de un hombre que conducía otro vehículo con el cual chocó de frente sobre la carretera que va de San Andrés Azumiatla a Guadalupe Tecola. El probable responsable, al ver lo que había provocado, optó por bajarse de la unidad y dejarla abandonada para darse a la fuga. Está identificado, según las autoridades, pero se desconoce su paradero. Los hechos se registraron alrededor de las 8 horas en la carretera antes referida, a la altura de un paradero conocido como La Curva de la Paz, en los límites de ambas juntas auxiliares. Cuando arribaron al lugar elementos de Tránsito Municipal, de policía y paramédicos del Sistema de Urgencias Médicas Avanzadas (SUMA), se encontraron las dos unidades que colisionaron de manera frontal. Se trató de un camión de pasajeros marca Mercedes Benz de color blanco, perteneciente a la ruta S-5 unidad 01, con placas 653 443-S del servicio de transporte público, cuyo chofer escapó y dejó abandonado el automotor. A unos metros quedó la camioneta con la cual chocó, una Oldsmobile Silhouette de color azul, con matrícula TYG 18-97 del estado de Puebla, en cuyo interior yacía el cuerpo del conductor. Paramédicos del Sistema de Urgencias Médicas Avanzadas lo valoraron, pero confirmaron que ya no tenía signos vitales, pues tras el impacto quedó prensado entre los fierros, su asiento y el tablero. Más tarde fue identificado como José Armando Rojas Ramírez, quien contaba con 59 años de edad. Los peritajes preliminares apuntan a que fue el chofer del camión quien provocó el percance porque invadió el carril contrario, ello aunado al exceso de velocidad y a que el pavimento estaba mojado por la lluvia. Alrededor de las 9:30 horas, el agente del Ministerio Público de culposos sur acudió junto con peritos de la Fiscalía General del Estado para llevar a cabo las diligencias del levantamiento de cadáver. El cuerpo fue trasladado en una unidad del Servicio Médico Forense (Semefo) a la morgue para que se llevara a cabo la necropsia de ley.