Junto a los restos fue localizado un automóvil calcinado; vecinos de la zona escucharon ruidos pero prefirieron no salir por seguridad Redacción Un joven de 21 años de edad fue asesinado a pedradas en la comunidad de Cuesta Blanca, municipio de Palmar de Bravo, de donde era originario. Los hechos se registraron la madrugada del martes y con respecto a la identidad del o los agresores no hay pistas. Además, el automóvil donde viajaba el ahora occiso fue quemado. Mediante una llamada telefónica se alertó al Arco de Seguridad de Palmar de Bravo que en la calle principal de la junta auxiliar referida se encontraba un hombre tirado, al parecer sin signos vitales. A unos metros de donde fue localizado el cadáver de Josué Israel Meza Ramírez se halló un vehículo calcinado, el cual, de acuerdo con los primeros reportes, sería un taxi. Al sitio de los hechos acudieron elementos de la Policía Municipal de Palmar de Bravo, quienes acordonaron la zona en espera del arribo de las autoridades ministeriales. De acuerdo con las primeras indagatorias los restos del joven hombre estaban en medio de un charco de sangre, incluso cuando los pobladores lo localizaron el vehículo aún ardía, pero los responsables de estos hechos ya se habían dado a la fuga. Al filo de las 3 horas vecinos de la comunidad señalada escucharon ruidos similares a los de perros y que un vehículo era apedreado, pero por seguridad prefirieron no salir en ese momento; momentos después se percataron de que el automotor había sido quemado. Al parecer, la unidad siniestrada es marca Volkswagen, tipo Pointer, con placas de circulación 815ZAV, el cual se presume sería un taxi, pero de acuerdo con los familiares del ahora occiso éste no era trabajador del volante. Al punto donde se suscitaron los hechos arribaron los padres del finado, quienes se identificaron como Aurelio Artemio Meza Guerra e Ignacia Josefina Ramírez Sánchez; mencionaron a las autoridades que su vástago se dedicaba al campo y sólo había estudiado hasta la secundaria. Agregaron que la última vez que lo vieron fue el lunes alrededor de las 18 horas, cuando salió a regar unas tierras de cultivo. Tras las primeras indagatorias los restos fueron trasladados al anfiteatro de Tecamachalco, donde se realizó la necropsia de ley y se estableció que el muchacho había sido golpeado en la cabeza y el abdomen. Por último, los padres del campesino reclamaron el cuerpo y éste fue trasladado a su domicilio, en la población de Cuesta Blanca.