El domingo por la noche, durante un jaripeo, se realizaron varias detonaciones de arma de fuego y el saldo reportado fue de tres personas muertas. Los hechos son investigados, pues se desconoce cuál fue el móvil y los responsables se dieron a la fuga.

Los hechos se reportaron al 911 a las 20:45 horas por una mujer; se registraron en la carretera estatal Izúcar de Matamoros-Atencingo, en el municipio de Chietla, en el Valle de Atlixco y Matamoros.

El Popular, diario imparcial de Puebla, recabó información sobre lo sucedido y se dio a conocer que personal de la clínica número 26 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Atencingo, dio a conocer el arribo de dos hombres que presentaban heridas de proyectil de arma de fuego.

En el nosocomio hubo alarma, pues los familiares de ambos estaban alterados pero además portaban pistolas, motivo por el cual se solicitó el apoyo de elementos de la Policía Municipal.

Fuentes oficiales confirmaron que ambos lesionados llegaron con vida, aunque para cuando llegaron seis oficiales a bordo de la patrulla P-020, ambos habían sido rematados por sujetos desconocidos que ingresaron al nosocomio y los ejecutaron.

Sin embargo, mientras se tomaba conocimiento de los hechos y de ambos decesos en el hospital, se informó que en la plaza de toros donde se llevó a cabo el evento, había fallecido una tercera persona.

Lo anterior provocó una intensa movilización de elementos de la Policía Estatal, quienes llegaron a la clínica y se entrevistaron con un hombre que identificó a una de las víctimas como su hijo, Faustino González Arias, alias El Cañas, de 28 años de edad, vecino de la colonia La Paz, en Atencingo.

La segunda víctima fue identificada como Alejandro González Jiménez, alias El Culichi, de 43 años. Ambos fueron ejecutados en el hospital y autoridades trasladaron sus cuerpos a la morgue en Izúcar de Matamoros.

Un médico de la clínica confirmó a la policía Municipal y Estatal que poco después de que ingresaron los lesionados, un grupo de personas llegó al nosocomio y disparó contra los hoy finados; uno de los cuerpos quedó en la camilla y el otro tirado en el piso.

La Agencia Estatal de Investigación se hizo cargo de las diligencias, pero hasta el momento se desconoce la identidad de la persona que fue hallada sin vida en el lugar donde ocurrió la riña, aunque no se descarta otro móvil por las circunstancias como ocurrieron las otras dos muertes.