Un hombre y una mujer, esposos, se cortaron las venas porque sus familiares los encerraron en un cuarto para que dejaran de tomar. Cuando sus seres queridos descubrieron lo que hicieron, los llevaron por medios propios al Hospital General de Cholula, donde el masculino murió y la fémina se encuentra en recuperación.

Estos hechos ocurrieron en un domicilio de Santa María Coronango, donde la mañana del miércoles Rosalba, de 38 años, y David "T", de 36 años, fueron encontrados ensangrentados dentro del cuarto donde sus familiares los mantenían retenidos para evitar que siguieran bebiendo.

La mujer dijo a sus familiares que decidieron suicidarse porque no les daban alcohol. Al verlos en mal estado por la sangre que habían perdido, los llevaron al Hospital General de Cholula en un vehículo de la familia. Al llegar, los médicos les indicaron que David estaba muerto.

Según declararon los familiares a las autoridades, la pareja tenía 22 años junta y eran bebedores ocasionales. Sin embargo, hace tres años comenzaron a hacerlo a diario y acudieron a un centro de Alcohólicos Anónimos (AA) en 2016. Al salir, en noviembre, juraron no beber durante un año.

La pareja cumplió su juramento, pero apenas llegó a la fecha límite volvió a tomar a diario. El 30 de enero ambos desaparecieron y no regresaron a su casa hasta el 3 de febrero, bajo los efectos del alcohol.

Ante esa situación su familia decidió encerrarlos para que no pudieran seguir emborrachándose. Así estuvieron hasta el miércoles, cuando al ir a buscarlos en la mañana notaron por la ventana que el colchón estaba ensangrentado. Debieron romper un cristal para ingresar y ayudarlos.

Después los llevaron al nosocomio mencionado, donde los médicos informaron que David estaba muerto. En el hospital las autoridades ministeriales realizaron las diligencias del levantamiento de cadáver e iniciaron la carpeta de investigación del caso.