Rescatan a par de ser linchados en Tehuitzingo

Dos sujetos fueron rescatados de la furia de vecinos de Tehuitzingo, quienes intentaron lincharlos asegurando que habían agredido a Luis Gómez Gutiérrez, cuando intentaban robar en su consultorio médico y domicilio, en la calle Venustiano Carranza, en la tercera sección.

Según los habitantes, fueron cuatro las personas (entre ellas una mujer) que la noche del lunes, alrededor de las 22 horas, se hicieron pasar por pacientes para ingresar al sitio a robar, pero como el médico puso resistencia fue agredido. Trascendió que le habrían dado descargas eléctricas, pero no ha sido confirmado.

Los vecinos lograron atrapar a dos de los sujetos y de inmediato tocaron las campanas de la iglesia para convocar al pueblo, que amagó con prenderlos con gasolina, pero la intervención de la Policía Estatal freno este hecho. 

Se sabe que uno de los detenidos fue asegurado por pobladores luego de que la cisterna donde estaba escondido comenzara a llenarse de agua.

Familiares del galeno herido, quien fue trasladado a la ciudad de Puebla, exigen al gobierno se aplique todo el peso de la ley.

Las autoridades de Gobernación llegaron después de las 4 horas, por lo que hasta entonces fueron entregados los presuntos ladrones.

Por su parte, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) informó, a través de un boletín, precisó que los dos masculinos fueron rescatados mediante un operativo coordinado con la Policía Municipal y agentes ministeriales.

"En una acción inmediata, ante el reporte de un intento de linchamiento, elementos de la Policía Estatal Preventiva se trasladaron al lugar de los hechos, donde se encontraban reunidas más de 100 personas, en actitud agresiva contra dos personas y de los elementos de la Policía Municipal.

"Una vez en el sitio, los policiales emplearon protocolos de medidas preventivas en coordinación con la Policía Municipal, implementando un dispositivo de seguridad y traslado. Asimismo, personal de la Secretaría General de Gobierno (SGG) y del Ministerio Público, establecieron un diálogo con los pobladores, lo que permitió salvaguardar la integridad física de los presuntos delincuentes.