A siete años de su captura, un peligroso homicida se escapó del Centro de Reinserción Social (Cereso) de Tecamachalco la mañana del lunes. De forma extraoficial, se sabe que Martín Aquino Flores Ángelo brincó una de las bardas del penal, por donde se encuentran las carpas de la feria. El hecho generó que se movilizaran elementos de las policías municipales, estatales y ministeriales.

De manera oficial, hasta el momento no se ha dado a conocer cómo ocurrieron los hechos; la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del estado confirmó la fuga de un reo del Cereso de Tecamachalco y a través de su cuenta en Twitter, confirmó que se inició un proceso legal contra el directivo del penal, José Arturo Torres.

La dependencia, a través de sus redes sociales, solicitó que cualquier persona que tenga información sobre su paradero se comunique al 911 o al 089.

Martín Aquino Flores Ángelo estaba preso por los delitos de homicidio calificado y lesiones dolosas.

Minutos antes del mediodía, se confirmó que el director del penal, José Arturo Torres, fue trasladado a las instalaciones de la fiscalía general, junto con algunos elementos de Seguridad y Custodia, y que por la tarde ya rendían sus correspondientes declaraciones.

El 7 de marzo de 2011, la entonces Procuraduría General de Justicia -hoy Fiscalía General- informó que tras un operativo implementado en Palmarito Tochapan, junta auxiliar de Quecholac, se cumplió la orden de aprehensión contra dos personas, una de ellas, Martín o Ángelo Martín Aquino Flores.

La PGJ informó aquel día que también se detuvo a Rey o Reynaldo Fuentes Morales para darle cumplimiento a los mandatos de captura emitidos por el juez penal de Tecamachalco en contra de ambos sujetos, dentro de los procesos 31/2011 y 28/2011, respectivamente, ambos por los delitos de lesiones dolosas y ataques peligrosos.

Ambos estaban identificados como algunos de los principales responsables de hechos de violencia acontecidos en aquella región.

Sin embargo, las detenciones ocurrieron dos días antes, el 5 de marzo, cuando alrededor de mil elementos de diversas corporaciones policiacas de los tres niveles de gobierno se desplegaron por la región, implementando un operativo con saldo de 12 personas aseguradas.

La mayoría de los detenidos -de apellido Fuentes-, obtuvieron su libertad, pero entre los que quedaron a disposición de la autoridad correspondiente se contó a Martín Aquino Flores, quien fue procesado por el homicidio de Roberto Fuentes Ramírez, alias La Bicha.

Hasta hace unos años, los hechos de violencia ocurridos en la región que comprenden Tecamachalco y Quecholac obedecían a los conflictos entre las familias Fuentes y Aquino, que dejaron saldo de varios tiroteos, homicidios y ataques armados.

Su imagen ya ha sido boletinada por las autoridades para tratar de dar con su paradero y poder reaprehenderlo, para que siga pagando su condena, pero además para fincarle los nuevos cargos por la evasión.

El parte oficial

La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) informó que "implementó un operativo de búsqueda para dar con el paradero de Martín Ángelo Aquino Flores, sentenciado por los delitos de homicidio y lesiones dolosas, quien se evadió del penal de Tecamachalco la mañana del lunes.

"Mediante repuesta inmediata, autoridades estatales como municipales realizaron un despliegue de elementos para dar con su paradero, tras dar la alerta de fuga de la persona privada de su libertad.

"Las autoridades municipales son las responsables de la contratación y evaluación de los elementos asignados a este Cereso, por lo cual es su competencia la seguridad del mismo.

"Por lo anterior, se dio parte a la Fiscalía General del Estado (FGE), que dio inicio a la carpeta de investigación correspondiente. Asimismo, se puso a disposición, en calidad de presentado, al director del penal para deslindar responsabilidades sobre este hecho.

"La SSP reforzará acciones de prevención que permitan la ubicación y detención de Martín Ángelo Aquino Flores para salvaguardar la integridad de los poblanos, y pone a disposición de la población el número de emergencia 911 y 089 de denuncia anónima, para cualquier información que ayude a su reaprehensión".

Los antecedentes

El penal de Tecamachalco no presentaba una fuga desde 1996, cuando huyeron tres reos pertenecientes a una peligrosa banda. Por dicho caso trascendió que hicieron un túnel para poder escapar; personal del penal fue procesado por su presunta complicidad en esos hechos.

En 1999 varios internos del mismo Cereso intentaron escapar del inmueble realizado una excavación hacia un taller de artesanías, pero esto fue frustrado.

En 2002 hubo un hecho similar, aunque en aquella ocasión los cinco reos que pretendían evadirse fueron asegurados tras una refriega con agentes, pues ya habían salido del sitio.